Miguel Herrera considera que el América tiene grandes posibilidades de lograr el título, lo cual, recordó, fue la exigencia que le hicieron los directivos Ricardo Peláez y Yon de Luisa al momento de contratarlo como entrenador: Así me lo pusieron de claro.

Con la clasificación asegurada a la liguilla, el Piojo observa una lucha nivelada al señalar que ningún equipo está despuntando: Se ve parejo, ha sido un torneo cerrado. Estamos igual que León; la diferencia son goles, a dos puntos de Toluca y a tres de los Xolos.

Se quejó de que no se valoran las tres victorias que su equipo consiguió en la semana: “Por ahí dicen que (Mario) Carrillo clasificó al América, y yo digo, ¿qué mérito le dan a los jugadores? Nadie les ha regalado nada.

“Le ganamos a León –ustedes dicen que es un fenómeno–, al Puebla, que no fue fácil, y luego venimos a CU... Ahora la meta es estar entre los tres primeros, superar lo del torneo pasado y alcanzar el título”.

Por otra parte, tras dirigir el entrenamiento en Coapa, opinó que hubo mala comunicación entre Carrillo y Alberto García Aspe, y reprobó que ambos ventilen versiones contrarias: “Si terminas mal con alguien no creo que deba revelarse lo que pasa en un club.

“Si es mi jefe inmediato, podrá dar su punto de vista –sobre la alineación de jugadores–, pero yo debo convencer con argumentos en la mesa y con resultados en la cancha.”

Recalcó que cualquier directivo puede sugerir jugadores y “muchas veces los entrenadores creemos que el equipo es nuestro y no es así, ¡es el que te dieron a dirigir!

“Ellos invierten, apuestan grande, son gente de futbol y a lo mejor quieren ver jugar a alguien en especial, ponen refuerzos y hay jugadores que cobran mucho dinero. Si al final te mueres con la tuya y funciona, el directivo dirá, ‘tenía razón’, pero los resultados mandan...

Yo siempre me iré agradecido de un club porque me dieron trabajo, y afortunadamente nosotros estamos a todo dar.