La aceptan ya 9 países; combates en Idleb, Ras Ain y Damasco
Miércoles 21 de noviembre de 2012, p. 27
Londres, 20 de noviembre. Gran Bretaña reconoció hoy como única representante legítima del pueblo sirio
a la opositora Coalición Nacional Siria, después que Francia y Turquía hicieron lo mismo en días pasados. Mientras, las tropas del presidente Bashar Assad luchaban para expulsar a las fuerzas rebeldes de un suburbio de la capital, en los combates más intensos ocurridos en los últimos meses.
El gobierno de su majestad decidió reconocer a la coalición nacional de la revolución siria y a las fuerzas opositoras como única representante legítima del pueblo de Siria
, declaró el ministro británico de Exteriores William Hague ante el Parlamento.
Es por el bien de Siria, de la región y del Reino Unido que los respaldamos y negamos espacio a grupos extremistas
, agregó.
La coalición, con sede en El Cairo, saludó el reconocimiento oficial británico, declaró Walid Bunni, vocero del grupo.
La Coalición Nacional Siria se formó en Doha a principios de este mes para unir a los dispersos grupos opositores sirios que luchan por derrocar a Assad.
De esta manera, Gran Bretaña se convirtió en el noveno país en reconocer a la oposición siria después de Francia, Turquía y los países del Pérsico.
La aceptación británica y de otros países a la coalición opositora podría ser el paso inicial para que llegue la ayuda internacional y la provisión de armas a los insurgentes, indicaron algunos analistas.
En el terreno, durante todo el día hubo enfrentamientos en la norteña provincia de Idleb en torno a la base militar Jeque Suleimán, localizada a 25 kilómetros de la ciudad rebelde de Alepo.
En Damasco, la capital, dos obuses alcanzaron el edificio del Ministerio de Información, sin causar víctimas, indicó la agencia oficial Sana.
Además, las tropas de élite de la Guardia Republicana, apoyadas por tanques, luchaban para expulsar a las fuerzas rebeldes de un suburbio, en los combates más intensos ocurridos en los últimos meses.
En la norteña localidad de Ras Ain, cerca de la frontera con Turquía, violentos enfrentamientos entre rebeldes y combatientes kurdos dejaron al menos 36 muertos, informó el Observatorio Sirio de Derechos Humanos con sede en Londres.