Washington, 1º de diciembre. El liniero Jovan Belcher, jugador de Jefes de Kansas City, se suicidó este sábado en la ciudad homónima de Missouri tras herir a su novia, informaron autoridades locales.

Belcher, de 25 años, habría usado la misma arma con que atentó contra la mujer para quitarse la vida en el estacionamiento del estadio Arrowhead, casa del equipo perteneciente a la conferencia americana de la NFL.

De acuerdo con los primeros reportes, el suicidio de Belcher fue atestiguado por el gerente general del equipo, Scott Pioli, y el entrenador en jefe, Romeo Crennel, a quienes el jugador les había dado las gracias por todo lo que hicieron por él para luego pegarse un tiro, informó el vocero de la policía Darin Snapp.

Autoridades de Kansas City dieron a conocer que cerca de las ocho horas (tiempo local) recibieron un reporte sobre una mujer herida con arma de fuego, quien fue declarada muerta poco después en un hospital local.

El atentado se produjo en casa de la novia del jugador. La madre de la víctima reportó el incidente e identificó al agresor como integrante del equipo Jefes de Kansas City.

Cuando llegamos, la señora nos dijo que su hija había recibido varios disparos de su novio. Lo identificó como un jugador de los Jefes, relató Snapp.

Poco más de una hora después, personal de seguridad del estadio reportó la presencia de un hombre armado en el estacionamiento y se apuntaba a la cabeza con el arma.

Jovan Belcher, después de un partido con los Jefes de Kansas City, equipo en el cual era titularFoto Ap

La descripción coincidía con la del sospechoso de la otra dirección. Ya teníamos una idea de lo que se trataba, indicó el portavoz. El jugador se estaba apuntando a la cabeza con una pistola, mientras estaba parado en la entrada de las instalaciones de práctica del equipo.

Allí estaban Pioli y Crennel, y otro entrenador o empleado estaba parado afuera y parecía estar hablando con él. Parecía que estaban hablando con el sospechoso, explicó Snapp. El sospechoso empezó a alejarse de los entrenadores y los oficiales, y entonces escucharon un disparo. Parece que se quitó la vida.

Las autoridades no tenían un motivo para el asesinato y suicidio, que conmocionó al equipo previo al juego que Kansas City tiene previsto este domingo en su casa frente a Panteras de Carolina del Norte.

El joven liniero nació en Nueva York y jugó en la Universidad de Maine. Cuatro temporadas estuvo con los Jefes y participó en todos los encuentros, incluyendo los 11 de esta temporada, en la que Kansas ha tenido una de sus peores temporadas (1-10).

Snapp dijo que la novia tenía poco más de 20 años, y la pareja tenía un hijo.