Pide impulsar sin ataduras
todos los motores del crecimiento
Recuperar la paz y abatir el rezago social, prioridades de su agenda
Plantea cinco ejes para transitar a una democracia de resultados
Domingo 2 de diciembre de 2012, p. 4
Para el presidente Enrique Peña Nieto, en México el Estado ha cedido importantes espacios
y la inseguridad y la violencia han robado la paz y la libertad en diversas comunidades
del territorio. Este es un país donde pocos lo tienen todo y la mayoría carece de condiciones para el goce efectivo de sus derechos
. En suma, una nación que crece a dos velocidades: una de progreso y desarrollo, y otra de atraso y pobreza.
Su aspiración, dijo entonces frente a casi 2 mil asistentes a la lectura de su primer discurso desde el poder presidencial, es llevar a la mexicana a ser una sociedad de clase media. Para ello, pidió romper mitos y paradigmas
e impulsar, sin ataduras ni temores
, todos los motores del crecimiento.
La recuperación de la paz y el combate al rezago social serán los principales imperativos de su administración, pues “en el México de hoy –señaló– lo que no puede ni debe permanecer es la situación de pobreza y hambre en que se encuentra un amplio sector de nuestra población”.
Insistente en el tema de la paz y ya anunciada su decisión de no obstaculizar más la Ley General de Víctimas, apuntó: Estoy convencido que el delito no sólo se combate con la fuerza. Es imprescindible que el Estado emprenda un esfuerzo integral para reconstruir el tejido social
.
Consideró que esa legislación es perfectible y apuntó: Mi gobierno participará de manera inmediata en el diálogo social y político que permita mejorarla
, pues se trata de contar con una legislación que proteja cuanto antes a las víctimas de nuestro país
.
Habló también de los jóvenes como un sector frecuentemente frustrado por no tener medios para prepararse o carecer de una educación de calidad, y aludió a los mexicanos que viven al día, preocupados por la falta de empleos y oportunidades, porque el país no ha crecido lo suficiente
. Son condiciones, admitió Peña Nieto, agraviantes y dolorosas, y de ahí su compromiso por elevar el nivel de vida de las familias.
Planteó entonces cinco ejes para transitar hacia una democracia que dé resultados tangibles
: lograr un México en paz mediante una estrategia de coordinación entre los órdenes de gobierno para combatir la impunidad. Las ciudades, los pueblos, las carreteras, deben volver a ser espacios de tranquilidad en los cuales los mexicanos transiten con seguridad, sin temor de perder la libertad o la vida
. Y agregó: no habrá seguridad mientras no haya justicia.
Los otros cuatro principios de su gestión se resumen en lograr un México incluyente; conseguir educación de calidad donde se formen mexicanos libres, responsables, comprometidos y solidarios; lograr un país próspero y con una participación propositiva en el ámbito internacional.
Antes de iniciar, pasado el mediodía, la lectura del discurso, Peña Nieto tomó la protesta de rigor a los integrantes de su gabinete que no entraron en funciones en los primeros minutos de ayer sábado.
En un salón del Palacio Nacional. les pidió entrega, compromiso y trabajo en equipo. También, dijo, les exigirá apego a la ley, honestidad, transparencia y rendición de cuentas.
Ya frente a sus invitados, y sin la menor alusión al retorno del PRI a la Presidencia de la República, Peña Nieto hizo un recuento de la evolución de la democracia mexicana y destacó su consolidación a partir del movimiento estudiantil del 68 y de las sucesivas reformas políticas
.
Asimismo, ofreció escuchar con respeto todas las voces de la sociedad, ejercer una administración abierta y que hable con verdad, que pida opinión, escuche a los ciudadanos y adopte las mejores decisiones, ser un facilitador y ejecutor
de las mejores ideas de los mexicanos, cumplidor de sus compromisos y propiciador de la unidad dentro de la pluralidad.
Transformar a México, según Enrique Peña Nieto, pasa por mover todo lo que se tenga que mover: la gente, la mentalidad, las instituciones
.