Yokohama, 16 de diciembre. El Corin-thians logró su segundo título del Mundial de Clubes e igualó al Barcelona, que ganó en 2009 y 2011, tras derrotar este domingo 1-0 al Chelsea con un gol del peruano Paolo Guerrero, para devolver la corona a Sudamérica, que no la ganaba desde 2006.

Guerrero, quien ya había marcado el tanto de la victoria del Corinthians en semifinales contra el equipo egipcio Al Ahly, se convirtió en héroe del conjunto de la Conmebol al anotar de cabeza en el minuto 69.

El Corinthians, que conquistó su primer Mundial de Clubes en 2000, dejó helado al Chelsea cuando un remate de Danilo pegó en la pierna de un defensa del Chelsea, se elevó cerca de la portería de Peter Cech y justo en ese momento apareció Guerrero para anotar el tanto del triunfo.

Soñé con el título y hacer el gol, afirmó Guerrero, quien se sobrepuso de una lesión en la pierna derecha sufrida el pasado 2 de diciembre para revertir el pronóstico de que no jugaría este certamen.

La apuesta del técnico de Corinthians, Tite, de poner de inicio a Jorge Henrique en el centro del campo, en lugar de Douglas, para tener más velocidad y frenar a Eden Hazard, dio resultado, ya que el equipo brasileño sorprendió al campeón europeo con jugadas rápidas.

Este título es una retribución a todos los aficionados corinthianos por todo el cariño que nos dieron. Tanto a los que estuvieron aquí como los que no estuvieron físicamente, pero sí de alma y espíritu. El equipo es muy merecedor del título por el juego que presentó, afirmó Tite.

Aunque los Blues tuvieron una gran ocasión en el minuto ocho, con un remate del defensa Gary Cahill, que tras golpear en una pierna del portero Cassio Ramos se paseó por la línea de gol, los brasileños generaron más oportunidades en el primer tiempo.

Ese remate de Cahill podría haber dado lugar a utilizar la tecnología que vigila la línea de gol, y que por primera vez se prueba oficialmente en este torneo, pero el balón quedó a varios centímetros de la raya.

A partir de ahí, el equipo sudamericano, alentado por unos 20 mil seguidores brasileños que viajaron a Japón, sorprendió con rápidos ataques al conjunto londinense, que no sabía cómo frenar a su rival.

No nos sorprendió el Corinthians porque lo habíamos visto antes. Tiene mucha calidad. Sabíamos que tendríamos ocasiones, pero debíamos aprovecharlas, se lamentó el técnico del Chelsea, el español Rafael Benítez.

Inundados de emoción, seguidores del Timao tomaron las calles de Sao Paulo para celebrar el segundo título de su equipo en el Mundial de Clubes, que representa la cuarta corona brasileña tras las conseguidas por el propio Corinthians en 2000, Sao Paulo en 2005 e Inter de Porto Alegre en 2006.

En tanto, el Chelsea profundiza su crisis en una temporada en la que perdió 4-1 la Supercopa de Europa contra el Atlético de Madrid y fue eliminado en la primera fase de la Liga de Campeones.