Ahora León y Xolos son el modelo a seguir de otros clubes
a frase de renovar o morir implica más que intentar dar un golpe de timón. Significa estar atento y receptivo a las innovaciones, y contemplar el entorno con ojo analítico. Eso es lo que han hecho algunos equipos como Santos Laguna, América, Pachuca, Tigres y Pumas de cara al arranque del torneo Clausura 2013.
La directiva de los Guerreros confesó su admiración por el reciente torneo que exhibieron los equipos León y Tijuana, los cuales incursionaron en el máximo circuito con pasos firmes, pronto se sintieron cómodos, como si siempre hubieran pertenecido a esa división, y dieron el toque de alegría y frescura que le urgía al futbol mexicano.
Alejandro Irarragorri no se conformó con promover los cambios superficiales que abanderó Decio de María, comprendió que a sus Guerreros les hacía falta un revulsivo real y fue por el técnico Pedro Caixinha, quien ha dado otro toque al equipo de Torreón. Los jugadores están motivados y todo señala que el Santos está de regreso para pelear el título.
El América en realidad fue de los primeros en intentar nuevas fórmulas. La iniciativa no llamó tanto la atención dados los últimos fracasos, parecía sólo un intento más, pero la dupla Peláez-Herrera ha redituado aceptables dividendos a un año de su comienzo, y ya hasta realizaron la venta histórica del defensa Diego Reyes a Europa.
El Oporto de Portugal encontró una veta en México. Mientras los equipos de máximo postín sólo miran a Brasil, Argentina y Europa oriental, el club luso más importante volteó hacia otros países de América e hizo jugoso negocio con el colombiano Radamel Falcao. En el caso del escuálido Reyes los informes indican que inclusive pagó más –cerca de 10 millones de dólares– por él, y tiene en la mira a Héctor Herrera y al regiomontano Jesús Corona.
Pachuca dio otro borrón en la pizarra: echó a Hugo Sánchez. Si el Penta tuviera capacidad de autocrítica y algo de modestia ya habría comprendido que el banquillo no es lo suyo y que ese bicampeonato con Pumas fue el postrero fruto de su carrera como jugador, una brillante trayectoria que motivó a esa generación de auriazules a la hazaña todavía no igualada por nadie.
Ahora los Tuzos parecen armados para emprender nuevas batallas de la mano de Gabriel Caballero, quien deberá domar al rebelde Ángel Reyna. Los Tigres, en tanto, están felices con el regreso del hijo pródigo, un Danilinho que promete portarse bien y buscar el título tras pasar un año en el Atlético Mineiro, mientras las Chivas andan a marchas forzadas con pocas expectativas.
En general se trasluce un ánimo de cambio en las directivas. Lo peor es cuando el afectado se pone una venda en los ojos. Todos verían normal que el presidente del Cruz Azul, Billy Álvarez, se indignara y molestara un poquito ante un nuevo fracaso, pero lejos de tomar el fuste corrió a apapachar a sus bien pagados y bien comidos jugadores.
En la pretemporada los celestes esgrimieron argumentos diversos, desde la mala suerte
hasta no sabemos qué pasa
y nadie le pone el pecho a esos 15 años de largo ayuno. El técnico Memo Vázquez, quien ciertamente clasificó a la liguilla en su primer torneo, ya es blanco de críticas por su parquedad, su carácter llano, sin tonalidades ni vibraciones.
El Atlas camina al borde del despeñadero y el Jefe Tomás Boy, el delantero Omar Bravo y compañía ya sienten la presión de delincuentes que lanzaron amenazas de muerte: Si nos vamos al descenso ustedes se van al panteón
y Esta gente no olvida, Omar Bravo
. La directiva rojinegra acudió a las autoridades civiles, pero también la Federación Mexicana de Futbol debe tomar cartas en el asunto con energía.
Luego de las fallidas participaciones de Chivas, Cruz Azul y Jaguares, más las vergonzosas renuncias de Tigres en la Copa Libertadores, a los equipos nacionales les urge plantar otra cara en el prestigioso torneo. Xolos pinta como la carta fuerte. León debe hacer a un lado las metas cortas y ver más allá de la permanencia. El Toluca no ha podido destacar en el plano internacional y depende mucho de un cada vez más lento Sinha.
Se va 2012 y sin duda somos privilegiados por asistir para atestiguar los 91 goles del fuera de serie Lionel Messi, el centenario de partidos del Chicharito Hernández con el ManU y el show aparte que representa la crisis del Real Madrid, dividida entre el bando luso encabezado por Mourinho y el ibérico por Íker Casillas.
