Miércoles 9 de enero de 2013, p. a11
Londres, 8 de enero. La nueva investigación judicial sobre la muerte de Amy Winehouse en 2011, dada a conocer este martes en Londres, confirmó que la joven cantante británica falleció de forma accidental tras ingerir gran cantidad de alcohol.
La investigación tuvo que repetirse después de la dimisión de la juez forense que presidió la primera vista en octubre de 2011 por carecer de calificaciones necesarias para ejercer el cargo en el Reino Unido.
Tras revisar las pruebas, la nueva encargada del caso en el tribunal forense de St Pancras, Shirley Radcliffe, dijo que la diva trash del soul
murió de intoxicación etílica
y que la cantidad de alcohol que tenía en el organismo estaba comúnmente asociada a muerte
.