Luego de ser operado por quinta vez, el ex marchista Noé Hernández tiene probabilidades de recuperar la visión del ojo derecho, aunque el pronóstico es reservado y dependerá de los cuidados que tendrá durante un mes, periodo en el que deberá estar en reposo absoluto, incomunicado y bajo observación médica.

Así lo informó la oftalmóloga Noemí Cortés luego de la cirugía que le realizó ayer al subcampeón olímpico de Sydney 2000 en un sanatorio de la colonia Roma.

Posteriormente fue trasladado a la clínica de neurotraumatología en Bosques de Aragón donde estará internado, ya que la víspera presentó una infección en el abdomen y en la parte del ojo izquierdo que perdió por el balazo que recibió el pasado 30 de diciembre en un bar de Los Reyes La Paz.

Acompañado de familiares y amigos, el secretario del deporte del PRI en el estado de México salió del nosocomio en camilla y tapado de pies a cabeza para ser transportado en una ambulancia de Chimalhuacán, su lugar de origen.

“Él sabe que pende de un hilo su ojo derecho. No haberlo extirpado es un aliciente, sólo retiramos el sangrado y tiene una fractura posterior en la parte central.

Noé está enterado del riesgo que esto puede causar por una infección o un mal cuidado y las complicaciones resultarían contraproducentes porque se le puede desprender la retina y presentar sangrado, dijo la especialista, quien hoy le retirará el parche y dará un informe más preciso de la visión periférica del medallista .

Con el rostro desencajado, Vianey Pedraza dijo sentirse otra vez nerviosa, preocupada e intranquila por la salud de su esposo, aunque Cortés Mendoza pidió a ella y los familiares el mayor cuidado posible: No debe tener movimientos bruscos, que sólo dos personas estén al pendiente de él y no dar más entrevistas, porque eso le ha provocado alteración y estrés.