Madrid, 3 de febrero. El líder de la oposición española, el socialista Alfredo Pérez Rubalcaba, exigió hoy la dimisión del presidente del gobierno español, Mariano Rajoy, por el escándalo de corrupción en el Partido Popular (PP), que ha provocado indignación en el país.

Rajoy es un lastre para este país, aseguró Rubalcaba en la sede del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), en Madrid. No puede llevar adelante la tarea que le exige la presidencia del gobierno.

Rubalcaba habló así un día después de que Rajoy rechazara ante la plana mayor del PP que él y otros dirigentes hayan recibido ilegalmente dinero del partido, tras la publicación de unos documentos manuscritos atribuidos al ex tesorero Luis Bárcenas con una supuesta contabilidad paralela en el PP mantenida durante casi dos décadas, entre 1990 y 2008.

Rajoy debe dar paso a otro presidente que dé credibilidad, manifestó el líder socialista. Hace falta un gobierno fuerte y confiable, y el del PP ha dejado de serlo, empezando por el propio presidente, indicó Rubalcaba, quien canceló un viaje a Portugal que tenía previsto para hoy ante la situación en España.

Los cuadernos de Bárcenas

El escándalo de los papeles de Bárcenas ha golpeado de lleno al PP y al gobierno de Rajoy.

Según la versión escrita en uno de los documentos publicados el jueves por el diario El País, cercano a los socialistas, y atribuidos al ex tesorero del PP, en esta organización se pagaron sobresueldos a altos cargos, entre ellos al propio Rajoy, a la hoy secretaria general, María Dolores de Cospedal, y a ministros de los gobiernos de José María Aznar.

Mariano Rajoy habría recibido pagos no declarados durante 11 años por 25 mil 200 euros anuales (unos 34 mil dólares). Los supuestos cuadernos de Bárcenas registran donaciones de empresas, sobre todo del sector de la construcción, al partido conservador.

Las sedes del PP, además, han sido blanco desde el jueves de manifestaciones, todavía limitadas en número de asistentes, pero que han servido, junto a las movilizaciones en las redes sociales, para crear un nuevo símbolo de protesta: el del sobre, exhibido por los manifestantes.

La tarde de este domingo, un centenar de manifestantes volvió a concentrarse ante la sede nacional del PP en Madrid, protegida por un cordón policial, a gritos de ¡dimisión!, ¡delincuentes! o no es un partido, es una mafia!.