Estrasburgo, 5 de febrero. Ante un bloque europeo dividido por las naciones que pugnan por más ajustes y los que están en contra, el presidente francés, Francois Hollande, advirtió que la excesiva austeridad perjudicará el crecimiento de los países europeos, dos días antes de la cumbre de gobernantes de la Unión Europea (UE) sobre el presupuesto 2014-2020.

Está bien que ahorremos, pero no que debilitemos la economía, señaló Hollande en el Parlamento Europeo. Los dirigentes de la UE se reúnen el jueves y viernes en una cumbre sobre el presupuesto plurianual, pero las posibilidades de un acuerdo son escasas ante posturas opuestas con Alemania y Reino Unido, que quieren más recortes, y España, Italia o Francia, que se resisten a perder las ayudas europeas.

Reino Unido y Alemania presionaron en noviembre para que se recortaran más de 100 mil millones de euros del total de 1.045 billones, reducción que otros veían excesiva.

Los miembros de gobiernos de la UE que preparan la cumbre del jueves creen que puede alcanzarse un acuerdo que fijaría el gasto de la UE en unos 955 mil millones de euros entre 2014 y 2020, reducción neta frente al presupuesto de siete años anterior.

En Bruselas, cientos de empleados de las instituciones de la UE realizaron una nueva protesta contra un eventual recorte en el próximo presupuesto y su posible repercusión en su salario y en su empleo. La protesta se da a dos días de la cumbre de los gobernantes de los 27 países que conforman la UE en la que debatirán el presupuesto comunitario para los próximos seis años.

Centenares de trabajadores del Consejo, Comisión y Parlamento europeos se manifestaron frente a la sede del Ejecutivo para exigir a los líderes de los 27 que acuerden un marco financiero lo suficientemente ambicioso y abandonen su actual política de austeridad ciega.

Deben entrar en razón todos aquellos que quieran amputar el presupuesto europeo más allá de lo que es posible aceptar, precisó Hollande.

El presupuesto debe proteger a los países europeos más frágiles y más expuestos a la crisis, afirmó. Hollande también criticó que el interés nacional prime sobre el europeo.