Víctimas de abusos por sacerdotes reiteran críticas al líder saliente
Miércoles 13 de febrero de 2013, p. 32
Roma, 12 de febrero. Las víctimas de abusos sexuales por sacerdotes católicos reiteraron hoy sus críticas al papa Benedicto XVI, al tiempo que partidarios de una reforma liberal en la Iglesia católica esperan que el sucesor de Joseph Ratzinger dé mayor voz a las mujeres y su acceso al sacerdocio, reconsidere las normas sobre el celibato y admita las parejas del mismo sexo.
Bishops Accountability, un grupo de presión de Estados Unidos dedicado a pedir que los obispos rindan cuentas, dijo que el Papa se disculpó frecuentemente por el daño cometido por sacerdotes pero nunca adoptó acciones efectivas para rectificar el daño incalculable
infligido a cientos de miles de niños por clérigos depredadores.
Las palabras de Benedicto XVI sonaron hueco
, dijo Anne Barrett Doyle, codirectora del grupo en un comunicado.
El escándalo de abusos sexuales estalló mucho antes de que el entonces cardenal Ratzinger fuera nombrado jefe de la Iglesia católica en 2005, pero ensombreció su papado desde el inicio, conforme salían a la luz más y más casos en diócesis de todo el mundo.
Cientos de miles de víctimas divulgaron devastadores relatos de abusos sufridos por religiosos, a veces durante años.
El capítulo más reciente de estos hechos ocurrió el viernes pasado cuando el arzobispo de Los Ángeles, Jose Gomez, destituyó al cardenal Roger Mahony, quien estuvo en medio del escándalo de pederastia en la Iglesia católica estadunidense por ocultar casos de abusos contra menores.
De todos modos, Mahony integrará el cónclave en el que se elegirá el próximo mes al sucesor de Benedicto XVI.
La Conferencia para la Ordenación de las Mujeres (WOC) dijo que la Iglesia católica pide a gritos un líder que dé a las mujeres un papel más destacado en la toma de decisiones. “El actual sistema continúa siendo un ‘viejo club exclusivo para hombres’ y no permite que la voz de la mujer participe en la decisión sobre el próximo líder de nuestra Iglesia”, indicó la directora de WOC, Erin Saiz Hanna.
WOC señaló que respeta la decisión de Benedicto XVI de dimitir, pero agregó que el pontífice, de 85 años, dio pasos atrás significativos
para las mujeres durante su papado. El año pasado, Benedicto XVI reiteró la prohibición de que las mujeres accedan al sacerdocio.
Otros críticos sostienen que el sucesor de Ratzinger debe reconsiderar las normas sobre el celibato y aceptar las parejas del mismo sexo.
Por lo pronto, representantes de la teología de la liberación, la corriente progresista de la Iglesia latinoamericana reñida con el Vaticano, se congratularon por la renuncia de Benedicto XVI, y expresaron su esperanza de que Roma se comprometa más con los pobres y viva una apertura.
Esperamos que otro Papa cree una atmósfera más abierta, que los cristianos puedan dialogar con la cultura moderna sin tantas sospechas y críticas
, dijo el teólogo brasileño Leonardo Boff en declaraciones a la cadena Telesur.
La teología de la liberación surgió en América Latina después del concilio Vaticano II (1962-1965) e impulsó la opción preferencial por los pobres
, que debía comprometerse con su emancipación social y política.
Esta postura, que en algún momento entusiasmó al papa Paulo VI, no contó con la simpatía de Juan Pablo II y fue desautorizada y perseguida por el propio Ratzinger desde su posición de prefecto de la Congregación de la Santa Fe.
En tanto, ocho feministas festejaron
en la catedral de Notre Dame de París la partida de Ratzinger. Gritaron consignas como ¡no más Papa!
En pechos y espalda se pintaron varias frases: no a la homofobia
, crisis de la fe
y bye bye Benedicto
.