Es el quinto suicidio por esa causa en menos de una semana; tramitan iniciativa antidesalojo
Jueves 14 de febrero de 2013, p. 30
Madrid, 13 de febrero. Un ciudadano español de 55 años, desempleado de larga duración y a las puertas de la expulsión de su vivienda por una deuda bancaria, se ahorcó hoy frente a la comisión judicial que subía a su domicilio para ejecutar el lanzamiento
. Es el quinto suicidio en menos de una semana que tiene como motivación esencial el proceso de desahucio y el decimotercero desde que explotó la crisis financiera y económica en España.
El país ibérico es uno de aquellos donde la crisis económica tiene su rostro más crudo y severo. Cada día se ejecutan más de 500 desahucios y sólo desde 2008 se han expulsado de sus viviendas a más de 400 mil familias. Este drama colectivo se ha agudizado a partir de 2012, cuando empiezan a entrar en la última fase –la de la expulsión– los procesos judiciales y, también, tras tantos años de recesión en los que el desempleo ha aumentado sensiblemente, hasta situarse en índices históricos de más de 26 por ciento de la población activa, es decir alrededor de 6 millones de personas.
Este nuevo suicidio, ocurrido en Alicante, sucedió de una forma dramática. La comisión judicial –integrada por un interventor, una pareja de policías y un juez– tocó el timbre de la vivienda, pero no obtuvo respuesta. Después de un rato decidieron forzar la puerta y entrar, ya que tenían autorizada la expulsión del inquilino y la apropiación del inmueble en favor de la entidad bancaria. Cuando subieron a la vivienda encontraron el cuerpo sin vida del ciudadano español, que se había ahorcado unos minutos antes. Agobiado por las deudas y la falta de oportunidades laborales, la víctima había advertido en varias ocasiones que si lo expulsaban de su vivienda ya no tendría otra alternativa que quitarse la vida. Tenía dos hijas, residentes en Barcelona.
Este nuevo suicidio se suma a los tres ocurridos ayer: el de una pareja de jubilados de Palma de Mallorca y el de un ciudadano de Basauri, en el País Vasco, que se tiró desde la azotea de un edificio cuando lo iban a lanzar
de su vivienda. El viernes pasado ocurrió algo similar en Córdoba, donde un desempleado a quien el banco ya le había arrebatado su casa se quitó la vida al no poder hacer frente a una deuda de 30 mil euros por los intereses generados por un préstamo para remodelar su casa.
Plataforma Afectados por la Hipoteca (PAH) y Alto a los Desahucios advirtieron: estamos frente a un asesinato, no un suicidio
, ya que estos suicidios están aparejados a la crisis y a una falta de responsabilidad del gobierno y de las administraciones. No se están tomando las medidas necesarias para que la situación económica no repercuta siempre sobre quienes menos tienen
, señalaron.
Refirieron que en un reciente congreso de siquiatría se especificó que actualmente puede haber en España unos nueve suicidios diarios relacionados con la crisis económica, y no se están tomando las medidas adecuadas.
Ante ese drama, en el Congreso de los Diputa