Rehúsan ir a las comunidades asoladas por bandas criminales o permanecen poco tiempo
Falta de personal satura servicios en las cabeceras municipales, señala funcionario de salud
Desde septiembre han cerrado 14 planteles de primaria y telesecundaria: dirigente sindical
Jueves 21 de febrero de 2013, p. 35
Mazatlán, Sin., 20 de febrero. Cinco comunidades serranas de tres municipios del sur de Sinaloa carecen de servicios médicos debido a que los profesionales se niegan a trabajar ahí o se marchan poco después de haber llegado, informó hoy Aarón Montoya Serrano, jefe de la jurisdicción sanitaria número 5 de la Secretaria de Salud del estado.
La Labor, localidad del municipio de San Ignacio, y La Tebaira, en El Rosario, tienen varios meses sin responsables médicos. El problema se ha extendido a los poblados La Petaca, Pánuco y El Palmito, en el municipio de Concordia, a causa de los hechos de violencia ocurridos en meses recientes.
Sí hay médicos capacitados, pero no aceptan ir a las comunidades de la sierra por temor a algún hecho violento, y no se puede obligar a los profesionales a que permanezcan en lugares donde existe incertidumbre
, dijo Montoya Serrano.
Ante la falta de doctores, los pobladores acuden a las cabeceras municipales para recibir atención y eso complica la prestación del servicio, dijo.
Salomé Rodríguez, secretario general de la sección 27 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación, reportó que desde la apertura del ciclo escolar, en septiembre de 2012, 14 planteles de primaria y telesecundaria ubicados en los municipios serranos de Sinaloa han tenido que cerrar a consecuencia de la violencia.
Los reportes de atentados han repercudido en poblados serranos de Choix, Concordia, Sinaloa de Leyva, Badiraguato y San Ignacio, cuyo personal ha tenido que ser reubicado, agregó.
Entre las principales causas del cierre de escuelas destaca la violencia de grupos delictivos. Por temor, las familias abandonan sus lugares de origen y los maestros también se van por miedo o porque no tienen alumnos, explicó.
Los saqueos de equipo y material en los planteles y las amenazas a docentes han aumentado, a pesar de que están en contacto con las autoridades de seguridad pública, dijo el dirigente.