La chihuahuense reaparece en las competencias este domingo
Viernes 22 de febrero de 2013, p. a15
A Vanessa Zambotti no le pesan los años y menos cuando cumple 15 como campeona nacional, título que defenderá el domingo en el frontón cerrado de Ciudad Universitaria para comenzar de cero como todos sus compañeros y ganarse un lugar en la selección de primera fuerza.
La chihuahuense reaparecerá en el tatami después de seis meses de inactividad, tras la eliminación olímpica en Londres y la rehabilitación que tuvo por la cirugía en los meniscos de la rodilla derecha. Afirma sentirse bien y muy motivada.
Competidora en la división superior a los 78 kilogramos, Zambotti sabe que en el Nacional todos los ojos estarán puestos en mí
, porque algunos desean que deje el judo y otros la animan a que continúe hasta sus cuartos Juegos Olímpicos en Río de Janeiro 2016.
Próxima a cumplir 31 años, el 4 de marzo, Vanessa afirma que no es el momento para tirar el judogui. No hay necedad ni es capricho de la nacida en Parral, pero su voz es firme. Cuando yo diga hasta aquí, cuando yo quiera me voy a ir
, sostiene.
La decisión de retirarse ni la piensa. La judoca se alista para cumplir otro cuatrienio olímpico, además de otro proyecto que tiene en puerta, una empresa deportiva en la búsqueda de apoyos a deportistas de alto rendimiento.
Recientemente concluyó sus estudios en comunicación y espera dirigir esa área en AOSports, una asociación sin fines de lucro para ayudar a una docena de deportistas, porque a veces el dinero del gobierno no es suficiente
para dotarlos de lo necesario, señala.
La experiencia de la chihuahuense la comparte a diario con sus compañeros en el gimnasio de la Comisión Nacional de Cultura Física y Deporte, en Villas Tlalpan, en la que jóvenes de diferentes entidades ven a Vanessa como un ejemplo, por su larga trayectoria en la disciplina en el ámbito mundial, en la que estuvo entre las 12 mejores del mundo, ex campeona panamericana y medallista en copas del orbe, cuyas virtudes, señalaría su entrenadora cubana, Dayma Beltrán, todavía hay que explotar
.