Personajes del ámbito cultural, académico y político consideran inaceptable el acto
Me recordó a los nazis incinerando libros
, afirma Octavio Rodríguez Araujo
Sábado 23 de febrero de 2013, p. 33
En diferentes ámbitos de la cultura, la política y la academia se condenó la quema de ejemplares de La Jornada por grupos afines a la ex rectora María Esther Orozco Orozco.
El escritor y académico Fernando del Paso señaló no comprender el conflicto en su totalidad, no obstante dijo que quemar periódicos es sin lugar a dudas un acto de barbarie
.
El agravio a La Jornada con la quema de ejemplares, característico de grupos fundamentalistas y gobiernos autoritarios, es un acto de desprecio
y censura
contra un medio de comunicación que hace uso de su libertad de expresión y eso es inaceptable, señaló el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del DF, Luis González Placencia.
Afirmó: “es un acto de protesta por la cobertura que La Jornada ha dado al conflicto y que, evidentemente, no les ha gustado; sin embargo, es un acto que lleva un componente de censura que me parece que es inadmisible”.
El ombudsman capitalino consideró que este medio ha dado cuenta del transcurso del conflicto en forma equilibrada, por lo que la quema de periódicos fue un exceso
.
Diputados de la Asamblea Legislativa del DF lamentaron a su vez que ese tipo de actitudes de intolerancia
priven en el conflicto de dicha casa de estudios.
El presidente de la Comisión de Gobierno, Manuel Granados, dijo que no son esas actitudes las que darán soluciones a los problemas, sino el debate de la ideas.
Yuriri Ayala, contra quien se lanzaron consignas en dicha protesta, lamentó que se haya rebasado el marco del respeto en las protestas, al manifestar su desacuerdo contra un medio de comunicación, en tanto que el coordinador del PAN, Federico Döring, acusó a algunos legisladores
de la misma ALDF de incubar
esas actitudes de intolerancia.
Al respecto, la periodista Carmen Aristegui consideró el hecho una forma desafortunada
de ejercer crítica contra un periódico que ha sido crítico a la rectoría de Esther Orozco.
Entrevistada luego de recibir la presea John Reed por su trayectoria periodística, Aristegui afirmó que este tipo de recursos, por quienes se puede suponer son simpatizantes de la rectoría no es algo que sea deseable en una mínima vida democrática
.
El doctor en ciencia política Octavio Rodríguez Araujo señaló: “este acto (quemar diarios) me recordó a los nazis quemando libros. Los únicos que han quemado libros en la historia del siglo XX y XXI han sido los nazis y los neonazis de las dictaduras como la de Argentina, Chile y Uruguay. En Argentina quemaron libros de caligrafía porque tenían pasta roja y no podemos pasar por alto novelas como Fahrenheit 451, para que no se pierda la cultura. Sólo la ultraderecha más intolerante quema periódicos y libros; no tiene otra explicación. Se puede estar de acuerdo o no. Sólo la gente estúpida hace esas cosas, y esto revela el significado de la ideología de la señora Orozco, que no se ha deslindado de quienes se autonombraron sus seguidores”,
Adolfo Sánchez Rebolledo aseguró que quemar diarios no es forma de solucionar los conflictos y que cualquier idea merece ser discutida o rebatida. “Me parece muy mal que se quemen, no sólo La Jornada; sino cualquier diario, por la libertad de expresión”.
La ensayista y crítica literaria Margo Glantz subrayó que el conflicto de la UACM se ha prolongado demasiado tiempo y ya es hora de que se resuelva, por lo que consideró que la mejor manera de hacerlo es destituyendo a Orozco
.
Son personas que no están preparadas. Esta gente sólo quiere sus puestecitos
, afirmó el poeta Juan Bañuelos.
Con información de Joselyn Castro