Julián Pastor regresa al teatro cabaret
divertida farsa onanista
La masturbación no es la práctica nefanda que paradigmatizó Marcial Maciel, opina el director
Jueves 28 de febrero de 2013, p. 6
Gina, de moral conservadora, es esposa de Gastón. Un día, ella lo descubre en el baño masturbándose, se escandaliza y no da crédito. Así comienza la divertida farsa onanista
, El club de la mano amiga, que se presenta en el teatro bar El Vicio, con dirección del cineasta y maestro del teatro-cabaret Julián Pastor.
Así como algunos hombres pertenecen al Club de la Pelea y otros al de Toby, muy pocos tienen la habilidad para incorporarse al de la mano amiga
. A esa hermandad aspira ingresar Gastón, mediante el perfeccionamiento de la práctica de la chaqueta.
Con dramaturgia de Édgar Álvarez Estrada, la historia gira en torno a una joven y exitosa pareja (Gina y Gastón), cuya relación se fractura a partir de que él es aficionado a la masturbación.
Gastón es convencido por su amigo Jesús para unirse, sin que su esposa lo sepa, a una logia de culto a Onán. Gina, con ayuda de su amiga Chela (de pensamiento más liberal), investiga a su marido y eso las lleva al club, donde descubren lo que ahí sucede.
Una serie de situaciones graciosas y otras hilarantes se encadenan en el montaje, en una historia en la que Gina deja a su marido, experimenta con varios amantes, pero también acaba por rendir culto a Onán.
El tema de la masturbación permite reflexionar sobre la incomunicación de la pareja, el individualismo, el miedo a la infidelidad, los prejuicios, la superficialidad y los juegos de poder.
Para Julián Pastor, quien con este montaje regresa luego de varios años de ausencia al teatro-cabaret, El club de la mano amiga es un espectáculo en el que se intenta demostrar que la masturbación es solamente un inofensivo suplemento alimenticio y no aquella práctica nefanda que paradigmatizó el padre Marcial Maciel
.
El club de la mano amiga se presenta los sábados, a las 20 horas, en el teatro bar El Vicio (Madrid 13, Coyoacán).