Reúne Diálogo de Petersberg a 35 países que preparan conferencia
Martes 7 de mayo de 2013, p. 38
Berlín, 6 de mayo.
La canciller federal de Alemania, Angela Merkel, llamó hoy a firmar el nuevo tratado con medidas vinculantes y metas obligatorias para reducir las emisiones de gases de invernadero.
En el inicio del Diálogo de Petersberg sobre el Clima Global dijo que si los países industrializados detuvieran mañana sus emisiones de bióxido de carbono ya no se podría evitar el calentamiento de la tierra de dos grados centígrados.
Advirtió que el ascenso de la temperatura sería inclusive superior, por lo que insistió en su llamado para que en 2015 esté listo el nuevo tratado que entraría en vigor en 2020. El Diálogo de Petersberg sobre el Clima reúne a 35 países para contribuir a la preparación de la Conferencia del Clima de las Naciones Unidas, que a finales de este año se celebrará en la capital de Polonia, Varsovia.
Las negociaciones sobre el clima están estancadas y en Petersberg se tratará de proporcionarles impulso, con la meta para 2015 de elaborar un nuevo Tratado sobre el Clima Global obligatorio para los 190 países que forman parte de las negociaciones.
Se pretende encontrar la forma para evitar que la temperatura terrestre no aumente más de dos grados centígrados respecto de la época preindustrial, aunque para una amplia corriente de opinión entre los expertos esa meta, fijada en 2010, tiene pocas probabilidades de lograrse.
En el foco del cuarto Diálogo de Petersberg está también reducir la emisión de gases de invernadero para 2020 en 30 por ciento del nivel que registraban en 1990, 10 puntos más de la meta actual. Sin embargo, ha habido reveses, por ejemplo la caída del precio de los derechos de polución con bióxido de carbono hizo que la electricidad producida por medio de carbón siga siendo lucrativa.
En Alemania, donde se ha incrementado el uso de la energía solar y eólica, las emisiones de ese gas se elevaron en dos por ciento.
Polonia, por su parte, se niega a aceptar una reducción del uso de carbón para la producción de energía, pues opera muchas plantas que lo emplean, postura importante porque se trata del país sede de la próxima conferencia sobre el clima.
Las negociaciones sobre el Tratado Global del Clima cuentan ahora con la participación de Estados Unidos, que se había resistido a aceptar metas vinculatorias de reducción de los gases de invernadero, mientras China está probando modelos como el del comercio de emisiones.