Economía
Ver día anteriorMiércoles 8 de mayo de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

México deberá crecer desde adentro, dice Agustín Carstens

Hay que prepararnos para la atonía económica y la inestabilidad financiera
 
Periódico La Jornada
Miércoles 8 de mayo de 2013, p. 35

La economía mexicana debe prepararse para hacer frente a un entorno económico internacional de mayor atonía, una vez que el espacio fiscal ha sido agotado y los gobiernos de países desarrollados se inclinan hacia la adopción de políticas monetarias que pueden ocasionar una salida masiva de divisas del país, advirtió el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens Carstens.

Hay que prepararnos para un entorno internacional caracterizado por un crecimiento económico bajo, cierta inestabilidad financiera y bajas tasas de interés por un periodo largo, dijo el gobernador del banco central al intervenir en la 23 Convención de Aseguradores de México.

En esas condiciones México no recibirá ya el impulso del comercio exterior y “deberá crecer desde adentro. La única forma de hacerlo, agregó, es siendo más competitivos, hacer más con los insumos que tenemos.

Por lo mismo, consideró muy acertado lo que se ha venido haciendo con el liderazgo del presidente Peña Nieto y de los partidos políticos. Apuntó que el crecimiento potencial del producto interno bruto (PIB) es de entre 3 y 4 por ciento, a lo que se podrían agregar de uno a 1.5 puntos más si se aprueban las reformas estructurales; de tal manera opinó que es factible que la economía mexicana pueda alcanzar tasas de crecimiento de entre 6 y 6.5 por ciento al año.

Sin embargo, dos problemas actuales parecieron atribular al gobernador del Banco de México. El crecimiento de los precios de los productos agropecuarios y el creciente flujo de divisas dirigidas a la compra de títulos financieros, principalmente los emitidos por el gobierno federal.

Burbuja temporal

Respecto a la inflación, Carstens caracterizó como choques temporales e idiosincráticos las recientes alzas en frutas y verduras, así como las del huevo y la carne de pollo, luego del descubrimiento de cepas de fiebre aviar en diferentes regiones del país.

Pensamos que esos choques, por factores sanitarios que afectan al huevo, o climáticos que repercurten en los precios de frutas y verduras, son transitorios y no vemos que tengan impacto sobre el resto de los precios de la economía ni están afectando la dinámica inflacionaria, sostuvo. Con más fe que fundamento aseguró que esas alzas pueden revertirse y la inflación convergerá paulatinamente en un nivel menor a 4 por ciento anual y para seguir su trayectoria hacia el objetivo de 3 por ciento.

Abundó: hemos hecho un avance importante a través de los años en reducir de manera estructural las presiones inflacionarias. Tenemos una inflación menos volátil y persistente y estamos trabajando para lograr la convergencia al 3 por ciento. Pero a corto plazo se nos ha complicado por los choques temporales que deberían disiparse y, por lo mismo, el Banco de México se mantendrá vigilante al respecto.

Influjos

Sobre el ascendente flujo de dividsas que arriban al país para dirigirse a comprar principalmente títulos emitidos por el gobierno federal, el gobernador del banco central dijo que no es de sorprenderse que México esté recibiendo montos muy grandes, porque hay, al menos, dos factores que lo propician.

Uno, por el diferencial de tasas de interés los flijos siguen entrando muy rápido. Aun con la reducción de 4.5 a 4 por ciento en la tasa de referencia en México esos capitales reciben un rendimiento de alrededor de 4 por ciento, mientras en su país de origen prácticamente no reciben nada.

El otro factor se refiere a las perspectivas de crecimiento de la economía mexicana, la cual, dijo, lleva 16 trimestres consecutivos en expansión.

Sin embargo, el gobernador Carstens reconoció que sería mejor recibir más inversión extranjera directa por los beneficios derivados en tecnología, creación de empleos y derrama económica que le acompañan, que títulos financieros.

Aunque finalmente la estabilidad como atracción de esos capitales ha sido más benéfica en un entorno externo muy complicado, explicó, esa abundancia de liquidez propiciada por la acción de los bancos centrales de los países desarrollados puede revertirse dentro de varios años, por lo que es conveniente desde ahora tomar medidas prudenciales.

Hoy se cuenta, puntualizó Carstens, con niveles históricos en la reserva internacional de divisas del país, 168 mil 500 millones de dólares hasta el 3 de mayo, más la línea de crédito flexible con el Fondo Monetario Internacional por 70 mil millones de dólares, para no crear vulnerabilidades de desastabilización financiera a través del influjo de capitales a México.