Lo permitirán una justa distribución de la riqueza y mayor seguridad, sostiene
‘‘A mediano plazo’’ la fórmula del progreso y desarrollo ayudará a tal fin, dice a procuradores de Justicia
Demanda corresponsabilidad y alineación de esfuerzos; no caben ‘‘tareas individualistas’’
Viernes 31 de mayo de 2013, p. 3
La fórmula de progreso y desarrollo, más la participación del Estado para asegurar una justa distribución de la riqueza y el establecimiento de condiciones de mayor seguridad permitirá, ‘‘y advierto que será en un mediano plazo, que la sociedad recupere la confianza en sus instituciones y en la autoridad’’, planteó el presidente Enrique Peña Nieto ante los procuradores de Justicia de todo el país, reunidos desde ayer en su 29 conferencia nacional.
Para lograrlo, indicó, debe haber corresponsabilidad, coordinación y alineación de esfuerzos entre los órdenes de gobierno y los poderes de la Unión, pues aquí no caben ‘‘tareas individualistas’’.
En ese marco, llamó a debatir y aprobar un nuevo código único de procedimientos penales, una ley general penal y agilizar el establecimiento del nuevo modelo de justicia penal acusatorio.
Actuación implacable e impecable
La Procuraduría General de la República (PGR) tiene instrucciones desde el inicio de esta administración –refirió– para fortalecerse, ser más moderna y, además de procurar justicia, disponer de mayor capacidad para investigar los delitos y de ese modo ‘‘aportar los elementos suficientes que le permitan al juzgador la aplicación de la ley’’.
En un hotel de la avenida Juárez, con el despliegue de un dispositivo de seguridad extremo en varias calles a la redonda, incluidas vallas de granaderos del Distrito Federal, el presidente Peña ubicó la tarea del Ministerio Público y de todas las procuradurías de Justicia, no sólo en asegurar una actuación ‘‘implacable, sino sobre todo, impecable’’.
Para ello, insistió entonces, deberán actuar con profesionalismo y con mayores elementos de investigación, para ‘‘asegurar que todo aquel que delinque realmente pueda ser sometido a la aplicación de la justicia con los elementos que aporte’’ el Ministerio Público. Y para ello, recalcó Peña Nieto, las procuradurías deben restructurarse a fondo, disponer de personal capacitado y usar la mejor tecnología en materia criminalística.
Todo ello, con respeto a los derechos humanos y cumpliendo el debido proceso. Es necesario, resaltó, contar con un estado de derecho sólido y eficaz donde la ley se cumpla sin excepciones, sin preferencias y sin demoras.
Con la participación de organismos civiles, estudiosos de la seguridad y legisladores, Peña Nieto resaltó el periodo de ‘‘transición histórica’’ por el que atraviesa el sistema de justicia penal, para lo cual pidió mayor trabajo y compromiso para ‘‘hacer realidad’’ el nuevo modelo de justicia acusatorio y adversarial previsto en la Constitución.
Según Peña, si se logra reducir el delito y la impunidad, los empresarios invertirán menos en seguridad y más en sus actividades, además de alcanzar mayor productividad, pues tener un sistema de justicia pleno y una aplicación irrestricta de la ley, permitirá mejores condiciones para el crecimiento económico y para el desarrollo social.