Un escudo de unos 200 policías y militares protege a la presidenta
Tenía previsto reunirse en Tokio con el premier Shinzo Abe y el emperador Akihito
Viernes 21 de junio de 2013, p. 3
Brasilia, 20 de junio.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, canceló este jueves un viaje a Japón debido a las multitudinarias protestas en todo el país contra los gastos del Mundial de Futbol y en demanda de mejores servicios públicos, informó a la Afp el servicio de prensa de la presidencia.
Sí, resolvió aplazarlo porque hubieran sido muchos días de viaje, y en función de los acontecimientos actuales decidió permanecer en Brasil
, afirmó una asesora de prensa que no quiso identificarse.
Rousseff tenía previsto realizar una visita oficial a Japón del miércoles al viernes de la semana próxima, para reunirse en Tokio con el primer ministro Shinzo Abe y el emperador Akihito.
Por otra parte, un cable de Dpa reportó que la presidenta Rousseff trabajó este jueves en su oficina del Palacio del Planalto, en Brasilia, protegida por un escudo humano formado por efectivos del ejército y la policía, mientras en las afueras del edificio millares de activistas realizaban una protesta.
La seguridad de la sede presidencial está a cargo de unos 200 integrantes de las fuerzas armadas y de la Policía, que impiden la invasión de manifestantes.
La manifestación en la capital federal coincide con las que se realizaron este jueves en forma simultánea en casi un centenar de ciudades en todo el país.
Las protestas comenzaron en Sao Paulo en demanda de la suspensión del aumento de las tarifas de transporte, y rápidamente se propagaron por todo el país, sumando a esa reivindicación varias otras. Exigieron más servicios de salud, vivienda y educación.
Además expresaron críticas al gobierno por la corrupción y los gastos millonarios en el Mundial de 2014 y la Copa Confederaciones, que actualmente se celebra en el país.