El volumen incluye textos del homenaje al escritor en 2010 y fotografías
Lunes 24 de junio de 2013, p. 9
El libro Alejandro Rossi fue presentado este domingo en la sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes mediante las palabras de evocación de lectores y amigos del filósofo, escritor y maestro fallecido hace cuatro años.
La mesa moderada por Juan Villoro resaltó las virtudes de este conversador y viajero, la valía de su trabajo literario y filosófico, la tensión entre estos dos aspectos, el trabajo docente y muchos otros elementos del autor multifacético mexicano de origen italiano.
Villoro afirmó que la remembranza de Rossi (Florencia, 1932-DF, 2009) pasa por supuesto por la lectura de sus libros, la discusión de sus ideas, pero sobre todo por el extraordinario afecto que le tuvimos a esta persona formidable
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En su intervención, el doctor, divulgador científico y miembro de El Colegio Nacional Ruy Pérez Tamayo, recuperó un artículo suyo sobre La fábula de las regiones, publicado en La Jornada. “Me impresionó la semejanza de la prosa de Rossi con la de Borges… se parecen en su capacidad de producir páginas perfectas, a las que es imposible imaginarlas con una sola palabra de más o de menos.
El mundo de Rossi es complejo, violento, trágico, no porque sus historias sean mórbidas o sus personajes dramáticos, sino porque así es la vida: es la preocupación, el tema central, de Rossi. Por lo mismo, también es irónico, sugestivo, y hasta un tanto humorista.
A decir de Villoro, Rossi estaba interesado en el trabajo de los jóvenes autores. En este aspecto se dieron las palabras de la narradora Guadalupe Nettel, quien conoció la obra del autor de Un café con Gorrondona para este homenaje. “Esta incursión tan postergada de la escritura de Rossi tuvo finalmente a este libro como introducción, cosa que celebro por los resultados tan buenos que tuvo… Los libros nos encuentran en el momento indicado.”
Alejandro Rossi –abundó Nettel– es un intento muy logrado de conservar una parte de la esencia de este escritor. Los retratos y las fotografías que se incluyen aquí nos permiten conocer algunos de sus gestos, de sus miradas, desde las más filosas hasta las más tiernas
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El poeta y ensayista Luigi Amara, que comparte con Rossi la ascendencia italiana y el estudio de la filosofía y luego el tránsito a la literatura, manifestó que se sintió muy cercano, a pesar de no tratarlo personalmente, por verse reflejado en las tensiones y preocupaciones en torno a esa mudanza.
“Alejandro Rossi se alejaba de la actualidad en el sentido noticioso, periodístico… creo que se estaba acercando a la vida desde un punto de vista mucho más decisivo que ése, a través del pensar sobre la vida cotidiana, sobre aquello que no aparece en los periódicos, pero que nos constituye, aquello a lo que no le prestamos atención y que efectivamente puede ser considerado nadería.” Ejemplificado, dijo, con la molestia, la irritación que tenía frente a la idea de interrupción, que se vaya el agua y empiecen a hacer ruidos las tuberías
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Para concluir, la fotógrafa Paulina Lavista, autora de la mayoría de las imágenes del volumen, manifestó que una de sus mejores buenas suertes en la vida fue conocer a Rossi. Siempre estuvo dispuesto conmigo a dejarse retratar
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Alejandro Rossi fue coeditado por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, la Universidad Nacional Autónoma de México, El Colegio Nacional y el Fondo de Cultura Económica, con la compilación de Olbeth Hansberg y Guillermo Hurtado. Reúne 22 textos escritos para el homenaje que se brindó a Rossi en 2010, además de imágenes realizadas por Lavista, Rogelio Cuéllar, Maritza López y Arnaldo Coen y Saúl Villa, entre otros.