La obra N°..., No Identificado, de la coreógrafa y bailarina Rossana Filomarino, es una representación de las miles de personas que han muerto a causa de la violencia en México.

Los bailarines del Centro de Producción de Danza Contemporánea (Ceprodac) fueron los encargados de reflejar la impotencia de la sociedad frente a la delincuencia organizada, en el Teatro de la Danza, del Centro Cultural del Bosque, como parte de la temporada Preceptos en Cuerpos Mentales.

Las imágenes que producen los bailarines, acompañados por una tenue luz, viven y mueren a lo largo de la obra en alusión a las víctimas de la narcoviolencia, como una especie de protesta interna provocada por ese sentimiento de impotencia.

En otro momento de la pieza está presente la necesidad de buscar al otro, de encontrar consuelo, pero también se interpreta la agresión generada por la atmósfera violenta.

“La obra surgió –explicó la coreógrafa– de la ira contenida que no sabemos cómo canalizar para mejorar la situación. Es una protesta interna que ojalá no explote, porque la violencia se está impregnando en nuestra vida cotidiana.”

En esta propuesta, Filomarino muestra cómo afecta a la sociedad la violencia, y aunque no propone soluciones, con sus imágenes poéticas busca conmover al público para que reaccione y reflexione sobre lo que ocurre en el país.

No es tarea del artista dar soluciones, nosotros ponemos interrogantes. La violencia que sacude a México en estos momentos es estremecedora. Contra ella hay que levantar muchas voces: aquí está la de los intérpretes y la mía, para ser compartida con los espectadores, señaló la coreógrafa.

En N°..., No Identificado, Filomarino explora las partes más profundas de las emociones del ser y de sus relaciones sociales para reflejar la pérdida de valores esenciales. Se trata de una metáfora del desmoronamiento social.

La obra se concretó hace dos años y al igual que otras coreografías de Rossana Filomarino invita a reflexionar sobre el devenir de la sociedad. Con esta visión crítica, el Ceprodac intenta sensibilizar al espectador para que se genere un cambio en el país mediante pequeñas acciones.

Con la interpretación de Ulises González, Juan Madero, Kenya Murillo, Edith Pérez, Gersaín Piñón, Jorge Monzón, Ricardo Rodríguez, Sheila Rojas, Arturo Serrano y Raúl Trejo, del Ceprodac, la obra se presenta hasta hoy en el Teatro de la Danza del Centro Cultural del Bosque (Reforma y Campo Marte, atrás del Auditorio Nacional).