En septiembre adjudicará primera línea
Domingo 21 de julio de 2013, p. 30
Madrid, 20 de julio.
Animada por su contrato del AVE del desierto
en Arabia Saudita, España espera vender sus trenes de alta velocidad en el extranjero con base en una estrategia motivada por su situación económica, pero cuyos beneficios son inciertos.
El próximo objetivo es Brasil, donde en septiembre se adjudicará la primera línea de alta velocidad sudamericana entre Río-Sao Paulo-Campinas, por un monto estimado de 16 mil 400 millones de dólares. España concurre con un consorcio de 11 empresas públicas y privadas.
Este contrato es importante porque es América Latina, y las relaciones de España y Latinoamérica son especialmente intensas
, subraya Rafael Catalá, secretario de Transportes.
Es importante (también) porque es alta velocidad y queremos demostrar que somos líderes en el mundo en estos temas
, añadió.
Para demostrarlo, Madrid dispone de una prestigiosa carta de presentación: su victoria en 2011 en la licitación para la línea La Meca-Medina, denominada el AVE del desierto
, una hazaña de 6 mil 700 millones de euros; es decir, su mayor contrato internacional de la historia, que ganó en dura lucha con el tándem francés Alstom-SNCF.
Además, la cuarta economía de la zona euro tiene una red nacional de alta velocidad española
(AVE) de 3 mil 100 kilómetros, la segunda del mundo detrás de China.
Sin embargo, Alejandro Lago, profesor de logística de la IESE Business School, afirma que para la alta velocidad no existe un mercado enorme
. Sobre todo en tiempos de crisis el análisis coste-beneficio es realmente difícil de justificar, sólo con un modelo a muy largo plazo
, explica.
Sólo dos líneas en el mundo han recuperado la inversión: Tokio-Osaka y París-Lyon
, afirma Germa Bel, de la Universidad de Barcelona, quien destaca que Francia renunció a priorizar la red de alta velocidad frente a otros medios de transporte, pues constituye un plan generador de miles de millones de deuda.