Miércoles 31 de julio de 2013, p. 30
Nueva York, 30 de julio.
El banco estadunidense JPMorgan Chase acordó el martes pagar 410 millones de dólares como devolución de ganancias ilícitas, penalidades e intereses, para cerrar una demanda de la Comisión Federal de Regulación de Energía (FERC, por sus siglas en inglés) que lo acusaba de manipular precios de la electricidad. El anuncio surge luego de que el lunes la FERC publicó un documento donde afirmaba que una división del banco, JPMorgan Ventures Energy Corporation había violado la reglamentación de la comisión que prohíbe las manipulaciones de precios en los mercados de electricidad.
La unidad de operaciones de materias primas de JP Morgan que se convirtió en uno de los mayores operadores de electricidad de Estados Unidos con la adquisición en 2008 de Bear Stearns, acordó pagar una multa civil de 285 millones de dólares y devolver 125 millones por estrategias manipulativas de licitación
.
La autoridad reguladora discute desde hace meses con JPMorgan por este caso. Según la FERC, trabajadores de JPMorgan Ventures Energy influyeron en los precios de los mercados de electricidad en California y el Medio Oeste entre septiembre de 2010 y noviembre de 2012.
No admite ni rechaza culpa
JPMorgan Chase confirmó el acuerdo pero no reconoció culpa, aunque tampoco discutió los cargos. El mayor banco de Estados Unidos indicó en un comunicado que aceptó pagar, sin admitir ni rechazar
violaciones de la reglamentación sobre energía.
Es la segunda sanción más grande en la historia de la FERC y llega en momentos en el que el regulador redobla su búsqueda de hechos delictivos tras el espectacular colapso de Enron, la empresa de energía estadunidense que colapsó en 2001 tras el escándalo sobre el uso de prácticas irregulares de contabilidad
Brian Marchiony, portavoz de JPMorgan, dijo que el acuerdo no tendría un impacto material sobre nuestras ganancias
porque el banco previamente había apartado reservas.
El presidente ejecutivo Jamie Dimon ha intentado este año resolver las varias investigaciones del gobierno y corregir los problemas que los reguladores habían encontrado en el banco, en un esfuerzo por adoptar una postura más conciliadora en momentos en que se imponen nuevas normas a más de cinco años del comienzo de la crisis financiera.
La FERC pidió hace poco a Barclays 488 millones de dólares en un caso similar.