Activó el freno muy tarde y descarriló a 153 kph, según cajas negras
Miércoles 31 de julio de 2013, p. 24
Madrid, 30 de julio.
El tren accidentado la semana pasada en Santiago de Compostela, que provocó 79 muertos, circulaba a 192 kilómetros por hora y el conductor sólo logró disminuir la velocidad a 153, al momento de descarrilar en la curva, en cuyo tramo la máxima permitida es de 80, de acuerdo con las dos cajas negras revisadas por las autoridades.
El maquinista Francisco José Garzón Amo activó el freno de emergencia pero ya era demasiado tarde, además de que al momento del impacto mantenía una conversación con la central ferroviaria, informó el Tribunal Superior de Justicia de Galicia tras analizar el contenido de las cajas negras del tren del pasado miércoles 24 de julio.
Según esos informes, al parecer el despiste
que dijo haber sufrido el maquinista fue causado por una llamada que recibió de un supervisor de la central de Renfe, compañía de ferrocarril española, que le informaba vía telefónica el trayecto que tenía que seguir de Santiago de Compostela a Ferrol, donde culminaba al viaje, procedente de Madrid.
En ese momento, según la información de las cajas negras, el conductor consultó los mapas de las vías de trenes de la zona y mientras hablaba con el supervisor y estudiaba los documentos cartográficos, se vio de pronto en la curva. Así, sólo pudo activar el frenado segundos antes del accidente.
Vecinos de la zona donde ocurrió el siniestro rindieron declaración y detallaron fragmentos de comentarios que hizo el conductor: se lamentaba por el accidente y decía reiteradamente me quiero morir
, además de afirmar que él mismo había denunciado a la dirección de seguridad de Renfe los fallos en ese tramo detectados en viajes anteriores.
Rafael Rico, vocero del sindicato de maquinistas de Galicia, confirmó que Garzón Amo había alertado a sus superiores de una falta de seguridad en el tramo donde ocurrió el accidente. Indicó que los maquinistas sabían eso y ya lo habían hecho saber. El día después del accidente nos lo dijo, cuando estaba en el hospital
, señaló Rico.
Hasta el momento el conductor es el único imputado en el caso, acusado de 79 homicidios imprudentes y actualmente se encuentra en libertad vigilada. No obstante, está pendiente una comparecencia ante el Congreso de la ministra de Fomento, Ana Pastor, que ella pidió para informar sobre lo que se considera el peor accidente ferroviario en cuatro décadas.
También pidieron declarar ante los diputados los presidentes de Renfe y del organismo que gestiona las infraestructuras ferroviarias, mientras se analizan los protocolos de seguridad.
Cabe recordar que ese tramo de la vía de alta velocidad había sido definido por peritos y técnicos del Ministerio de Fomento español como difícil
, y ni así se instalaron los sistemas de autofrenado que se utilizan con enorme éxito desde hace varias décadas en la mayoría de los trenes de alta velocidad en el mundo.