La eventual legalización de la mariguana es una decisión que los mexicanos no podemos tomar a la ligera, sostuvo Mauricio Hernández Ávila, director general del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP), porque el daño que hacen las drogas legales, el tabaco y el alcohol, nos inclinan a pensar que no es buena idea meterle otra droga a la población.

Entrevistado durante el Foro Internacional en Favor de la Salud, indicó: si no hemos podido controlar las drogas legales y no hemos terminado de analizar el daño que provocan, legalizar la mariguana quizás traería mayores problemas sanitarios, sobre todo porque las principales enfermedades que afectan a la población están relacionadas con el consumo de drogas legales.

Puede que sea muy buen negocio (legalizar la mariguana), que haya grandes ganancias para algunos, pero para el sistema de salud pública no hay una respuesta clara. No tenemos fondos suficientes para controlar el tabaco y el alcohol. Tenemos 4.5 millones de mexicanos adictos al alcohol y no hay recursos (para atenderlos). Entonces, ¿quién va a poner esos fondos?, ¿le van a poner un impuesto? Desde el punto de vista de salud debemos estar preocupados de que esto suceda.

Consideró que se trata de una discusión válida, pero es necesario que las personas que abogan por la legalización vean los estragos que causan el tabaco y el alcohol. Subrayó que primero habría que ver cómo estamos haciendo con las drogas legales, y preguntarnos si queremos otra.

Por otra parte, la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias de México se manifestó en favor de los usos terapéuticos de la mariguana y señaló que está abierta a participar en eventuales discusiones sobre el tema, así como a seguir puntualmente cualquier regulación para contar con un estricto control de esa sustancia.

En el quinto Congreso Nacional de Empresarios de Farmacias, Anselmo García Padilla, vicepresidente de la Unefarm, dijo a La Jornada: estamos listos y puestos a colaborar no sólo en la discusión sino también para participar en la regulación que se genere para apoyar a todos los enfermos que requieran la mariguana de forma terapéutica.

Indicó que en materia de seguridad no existiría problema, pues así como manejamos los medicamentos controlados, que son sustancias mucho más riesgosas e importantes en temas de regulación, no habría ningún problema para incorporar estos productos (derivados de la mariguana) en el esquema que la autoridad sanitaria dispusiera.

Óscar Zavala Martínez, presidente de la Unefarm, precisó que existen condiciones para analizar el tema y sostuvo que estaríamos preparados, sin ningún problema, siempre y cuando esté autorizado en la Ley General de Salud (LGS) y el reglamento de insumos para la salud y avalado por la Secretaría de Salud (Ssa) y la Cofepris.

En contraparte, Antonio Pascual Feria, presidente de la Asociación Nacional de Farmacias de México (Anafarmex) dijo que los afiliados a esta organización tienen como prioridad la protección de la salud y no privilegiarían la ganancia económica. Indicó que de aprobarse, antes de introducir cualquier presentación de cannabis a sus farmacias se haría una consulta a los integrantes de la Anafarmex. Nosotros anteponemos la salud y después el negocio.