Sociedad y Justicia
Ver día anteriorDomingo 18 de agosto de 2013Ver día siguienteEdiciones anteriores
Servicio Sindicado RSS
Dixio

No respeta las fases formativas de la primera infancia, advierten

Lamentan expertas que el programa para prescolar prohíba jugar y cantar
 
Periódico La Jornada
Domingo 18 de agosto de 2013, p. 29

Actualmente, en la formación prescolar se maneja un modelo por competencias que prohíbe jugar y cantar, y lo que se impulsa es un proceso educativo que no respeta las fases formativas de la primera infancia, advirtieron especialistas, luego que el Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE) diera a conocer un informe sobre las actividades que realizan las educadoras en ese nivel educativo.

En el documento Prácticas pedagógicas y desarrollo profesional docente en prescolar, difundido el pasado jueves, se destaca que entre las acciones no congruentes con el Programa de Educación Preescolar (PEP) 2004 –que se impulsó como parte de una reforma de sus planes y programas de estudio– está el que los alumnos canten, bailen, dibujen o aprendan normas de higiene.

Al respecto, Etelvina Sandoval, experta en pedagogía y práctica docente de la Universidad Pedagógica Nacional, destacó que a los niños de tres a cinco años que cursan su educación prescolar no se les está dando la oportunidad de acceder al disfrute, al goce de encontrarse con el arte, con el juego y el canto, porque ahora todo tiene que tener una función educativa.

Ya no se permite el juego libre, incluso, dijo, en los recreos se debe promover que este tenga un sentido pedagógico, cuando lo único que se impone es un control de tiempos y movimientos.

Agregó que con modelos de competencias y habilidades se pasó de un proyecto educativo donde se busca cierta inducción de los menores en el mundo de las letras, a ver casi con normalidad que deben saber leer y escribir desde prescolar. Se le quiere dar a este nivel educativo, casi los mismos contenidos que se verían en primaria.

En entrevista por separado, Rosa María Hernández, directora de un prescolar en la delegación Iztapalapa, y con más de 28 años de experiencia docente, destacó que el nuevo modelo de competencias no fortalece una formación integral para los niños, a todos se les exige por igual, cuando hay diferentes etapas de aprendizaje y no todos están en aptitud de desarrollar la lectura y escritura.

Señaló que la convivencia cotidiana con sus pares, y establecer los mecanismos de cordialidad y respeto por el otro, es una tarea cotidiana en el salón de clases, pero los planes y programas de estudio sólo valoran si cumple o no con una habilidad, y aunque lo hace, se les consideran prácticas rutinarias.

La Secretaría de Educación Pública, advierte, se olvida que muchos niños no vienen del mismo entorno social, cultural y familiar. Muchos necesitan sentir que la escuela es un lugar donde puede jugar, reír y aprender, de acercarse con curiosidad a un mundo que están descubriendo, pero donde las reglas no son rígidas, donde pueden dibujar o bailar, porque buscan ser ellos mismos.