El tianguis consta de 120 puestos y se instala todos los martes desde hace casi 20 años
El sitio ha sido visitado hasta por colaboradores de Madonna o Eric Clapton, aseguran sus promotores
Miércoles 21 de agosto de 2013, p. 32
Alguna vez el compositor ruso Igor Stravinsky dijo: No basta con oír la música, además hay que verla
, y el bazar de músicos, a un costado del Metro Taxqueña, cumple esa misión.
Desde las siete de la mañana, cada martes, artistas de todas las edades, aficionados y consagrados, se dan cita para vender y comprar todo lo necesario para llevar a cabo su tarea y, si el bolsillo no lo permite, hacer trueque.
Es posible comprar o intercambiar Guitarras, saxofones, clarinetes, bajos, teclados, violines, baterías, trompetas, sintetizadores, boquillas, amplificadores, partituras, atriles y hasta un piano de cola
.
Josué Zárate llega cerca de las 11 de la mañana. Lo acompaña su hijo de cinco años. Al lado de otros vendedores saca del estuche su guitarra eléctrica verde y la vende en 2 mil pesos. Desde hace varios años toca el bajo en una iglesia cristiana y también hace lo propio en un grupo de funk. Desea comprarle a su hijo mayor una batería que vale como 20 mil pesos
. Así que está vendiendo cosas para reunir el dinero.
Son cerca de 120 puestos que han subsistido desde hace casi 20 años, organizados por jóvenes, que con altavoces piden a los vendedores que llegan por primera vez no permanecer en un solo lugar y moverse constantemente, pues uno de los requisitos de las autoridades para seguir allí es no bloquear el paso de los camiones que circulan.
Para Mario Rodríguez, quien varias décadas atrás fue cantante de románticas y rancheras
, tener un puesto de accesorios musicales es una manera de ir sobreviviendo
. Su hijo es locutor y le ayuda a atenderlo, al tiempo que ofrece sus servicios de locución profesional por mil 200 pesos.
Don Mario afirma que este bazar es único en la República mexicana, y surgió de la necesidad de querer seguir viviendo de la música, aunque los años, que no pasan en balde
ya no los dejen seguir en los escenarios.
Quienes integran la mesa directiva
del peculiar tianguis musical son en su mayoría cantantes, guitarristas y bajistas de la década de los 60, rocanroleros como Rafael Miranda, líder de los Sleepers, para quien la música es su vida, es todo
.
El bazar surgió hace 18 años en las instalaciones del Sindicato Único de Trabajadores de la Música (Sutm). Al principio eran unos 20 puestos y así se fue incrementando hasta llegar a más de cien
, relata.
El también guitarrista de Los Rebeldes del Rock dice que este bazar nació para tener algo mejor
basados en la idea de los trueques de instrumentos, porque algunos músicos no tienen el dinero suficiente, pero sí otros instrumentos
.
Este sitio ha sido visitado por grandes personalidades de la música entre ellos músicos de Madonna o Eric Clapton, quienes se dan su vuelta y hasta compran algo
, relató Rafael, quien inició su aventura musical hace más de 50 años.
“A los 17 años lo empecé como hobby y nos pagaban por hacer lo que nos gustaba; empezamos a ver que sí había lana, entonces le seguimos,” contó.
Sin embargo, vinieron otras épocas. Llegaron los 70 y la música disco, y él siguió con el rocanrol hasta que fueron desplazaron por las discotecas
.
Hoy afirma que un músico no es una cosa de primera necesidad
, y que atrás quedaron los años en que tocaba en El Rufles de la Zona Rosa, pero Rafael sigue tocando y dice que lo hará mientras su cuerpo se lo permita.
Los Sleepers siguen vivos, asegura, y lo confirma el guitarrista de la banda y otros colegas de la época que llegan al puesto de Rafael como cada martes a reunirse con los viejos amigos.