Sábado 24 de agosto de 2013, p. 8
El guionista, historiador y crítico de cine mexicano Francisco Sánchez Aguilar, quien en 1984 obtuvo un Ariel al mejor argumento original por El tonto que hacia milagros, falleció ayer a los 74 años.
Así dio a conocer la Sociedad Mexicana de Directores-Realizadores de Obras Audiovisuales, por conducto de su consejo directivo, que externó su pena por el sensible fallecimiento de su compañero y amigo.
“Era un gran amigo y un guionista con mucha sensibilidad, lo cual quedó demostrado en películas como Amor libre y Pueblo de madera”, dijo Víctor Ugalde, presidente de la Sociedad Mexicana de Directores.
Apuntó que libros como Océano de películas y Crónica antisolemne del cine mexicano, escritos por Sánchez Aguilar, son documentos que cualquier cineasta o gente que le guste el cine debe leer, porque ofrece una mirada crítica del quehacer fílmico nacional
.
La Academia Mexicana de Artes y Ciencias Cinematográficas y el Instituto Mexicano de Cinematografía expresaron su pésame a través de sus páginas oficiales en Internet.
De la redacción a la dirección
Pancho Sánchez, como lo llamaban sus amigos, nació el 22 de enero de 1939, en Ciudad Acuña, Coahuila.
En 1971 se incorporó a Procinemex, como jefe de redacción con oficina en Estudios Churubusco; un año después Alberto Isaac lo invitó a colaborar como crítico y periodista eb el diario Esto.
En 1973 debutó como guionista cinematográfico con Los que viven donde sopla el viento suave, con dirección de Felipe Cazals. Entre sus guiones destacan: Las noches de Paloma (1977), de Alberto Isaac, por el que recibió un Heraldo.
En 1999 incursionó en la dirección fílmica con Oficio: golfa/Mexican Pretty Woman; también escribió una decena de libros, entre los que destacan Todo Buñuel (1978).
Entre sus últimos trabajos como guionista figuran El tigre de Santa Julia, de Alejandro Gamboa (2001), y la adaptación de la novela La tregua, de Mario Benedetti, dirigida por Alfonso Rosas Priego (2002).