Un tribunal federal en materia laboral aclaró una duda que por muchos años permitió a los trabajadores sindicalizados de Petróleos Mexicanos (Pemex) heredar su plaza a sus parientes, al resolver que esa acción es improcedente y contraria a derecho.

El decimotercer tribunal colegiado en materia de trabajo negó una serie de amparos a varios trabajadores de la sección 39 del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM), quienes pidieron la protección de la justicia luego de que la paraestatal les negó la posibilidad de que sus hijos, hermanos u otros familiares fueran considerados para ocupar plazas que dejaron vacantes los quejosos, tras jubilarse.

En medio de un profundo debate sobre la propuesta de reforma energética del presidente Enrique Peña Nieto, el tribunal emitió esta sentencia que frenará una de las prácticas más añejas en Pemex: heredar las plazas a varias generaciones.

De acuerdo con la resolución del tribunal, para efectuar esos relevos se deben tomar en cuenta otros factores de los aspirantes, como su antigüedad en la empresa, su necesidad de mantener a una familia y si pertenecían anteriormente al gremio, entre otros.

Los magistrados establecieron que el Estatuto del STPRM, que obliga a ese gremio a recomendar a los familiares de sus integrantes para ocupar las plazas, está sujeto a múltiples restricciones legales.

Como parte de los argumentos que utilizaron los peticionarios del amparo, que no prosperaron, destacaron lo que establece el artículo 55 del estatuto sindical que prevé, entre otros derechos de los socios, que al jubilarse un trabajador si hubiera corrida escalafonaria y como consecuencia de ella la empresa solicitara cubrir la última plaza, será propuesto el hijo, la hija, hijo adoptivo, hermano o hermana, que previamente hubiera registrado como su derechohabiente.

Derechos sujetos a la ley

En la sentencia, de la que tiene copia La Jornada, se indica que “la facultad de regular en los contratos colectivos o estatutos el derecho de preferencia para ocupar plazas vacantes o puestos de nueva creación, no es irrestricta y sin control, sino sujeta a los principios derivados de la Constitución y la Ley Federal del Trabajo, dado que aquéllos son actos de particulares que de ninguna manera pueden estar por encima de éstos.

Este órgano de control constitucional reafirma que cualquier elemento de parentesco no puede estar por encima de los factores de antigüedad, nacionalidad, necesidad familiar y/o sindicalización de los trabajadores, indica la resolución.

El sindicato petrolero es uno de los gremios que más beneficios estatutarios tienen.

Apenas unas semanas atrás todo el gremio tuvo un aumento salarial de 3.99 por ciento, mientras que los líderes sindicales, comisionados y asesores recibieron un incremento de 13.4 por ciento en los apoyos que a diario tienen para viáticos y transporte, independientemente de su salario.

Según consta en el contrato colectivo de trabajo (CCT) 2013-2015, firmado hace unas semanas por el director de la paraestatal, Emilio Lozoya, y el dirigente petrolero, en el documento están asentados todos los apoyos para los secretarios generales de las 36 secciones, funcionarios, asesores sindicales y comisionados adscritos directamente a las órdenes del secretario general del STPRM, Carlos Romero Deschamps.

Cada uno de los líderes recibía diariamente 805 pesos como ayuda para viáticos y transporte; ahora recibirán 913 pesos y los gastos foráneos se elevan a 2 mil 238 pesos, según señala la cláusula 251 del CCT.

Además de este apoyo, el CEN del gremio recibirá una partida especial para gastos de viaje por 2 millones 842 mil 268 pesos.

De su lado, trabajadores petroleros entrevistados por este diario afirmaron que la corrupción impide que Pemex sea más productiva y rentable.

Los trabajadores sindicalizados, quienes evitan identificarse por temor a represalias, sostienen que México podría tener gasolinas más baratas y dejar de importar combustibles si la empresa funcionara con eficacia.

Sobre la reforma energética que presentó el presidente Enrique Peña Nieto, dicen saber poco, pero consideran que han escuchado que el interés de fondo es una especie de semiprivatización de la industria energética.

Otros petroleros prevén que antes de que se apruebe la iniciativa dejarán ir al dirigente del STPRM, Carlos Romero Deschamps, bien forrado y protegido, para que no corra la misma suerte que Elba Esther Gordillo.