Con el incremento de la obesidad también sube la demanda de servicios médicos que ayuden a revertir el problema. Una alternativa es la cirugía bariátrica, la cual existe desde hace unas cinco décadas y hoy es el tratamiento de elección para las personas con obesidad mórbida. Son, por ejemplo, aquellas cuyo peso corporal está excedido en 40 kilogramos, cuando se trata de un individuo que mide 1.60 metros de altura y pesa más de 100 kilogramos.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (Ensanut) 2012, el problema de la obesidad sigue en aumento; entre los hombres mayores de 20 años de edad, creció casi 40 por ciento entre el año 2000 y el 2012, al pasar de 19.4 por ciento a 26.8. mientras, en las mujeres el incremento fue de 35 por ciento, pues pasó de 26 a 35.2 por ciento.

Lo que ha pasado, de acuerdo con especialistas, por lo menos en México caímos en los excesos y en la preferencia por los alimentos procesados que contienen altos niveles de sal y conservadores que provocan el aumento de peso.

Alexis Bolio, director de la Facultad Mexicana de Medicina de la Universidad La Salle, señaló que debido a que las grasas dan buen sabor a los alimentos, también hay una tendencia a consumirlos más, así como a terminar todo el contenido del plato que sirven en los restaurantes.

Otro factor que ha contribuido al problema de la obesidad es que pasamos más tiempo sentados y también es frecuente, a causa de la falta de tiempo y el estrés, omitir alguna de las comidas. Esto favorece el aumento de peso corporal, indicó.

Para el experto, una solución son las comidas corridas porque están bien combinadas y contienen la variedad de alimentos que requiere el organismo. Y eso no es un asunto de expertos, sino de conciencia personal, señaló.

Sin embargo, en los casos de individuos con obesidad mórbida, la que ya no se soluciona con menos alimentación ni haciendo ejercicio o siguiendo alguno de los tratamientos farmacológicos disponibles, la opción es la cirugía bariátrica, señaló Miguel Herrera Hernández, cirujano en el Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán.

Comentó que las técnicas del procedimiento se han depurado con el paso del tiempo y en la actualidad se utilizan con más frecuencia la del by pass gástrico y la manga gástrica.

Ambas se realizan por laparoscopía, en un tiempo menor a dos horas y con buenos resultados. En el caso del by pass, que implica construir un reservorio pequeño, a partir del estómago y unirlo al intestino para que por ahí pase la comida, los pacientes reducen 70 por ciento del peso que tenían en exceso.

Con la manga gástrica, los cirujanos “quitan la curvatura mayor del estómago para dejarlo con una forma tubular y la disminución es de 60 por ciento del sobrepeso.

En ambos casos, disminuye el apetito y se alcanza la saciedad con menor cantidad de comida. El especialista reconoció que a pesar del procedimiento, alrededor de 20 por ciento de los pacientes no modifican sus hábitos alimenticios y al paso del tiempo vuelven a subir de peso.