Muestra en 24 horas la presencia del microorganismo; gana dos días a los métodos actuales
Es una botella de plástico del tamaño de la palma de la mano, rellena con líquido nutriente que ayuda al crecimiento del germen; puede identificar los ocho más comunes, explica científico
Martes 10 de septiembre de 2013, p. 2
Washington, 9 de septiembre.
Una nariz artificial capaz de detectar olor de gérmenes que producen el envenenamiento de la sangre y que podría ayudar a salvar muchas vidas y reducir costos médicos fue presentada el domingo en una conferencia en Estados Unidos.
Los científicos que desarrollaron esta nariz
afirman que puede mostrar en 24 horas si la sangre de un paciente tiene la bacteria que causa septicemia, y ganar de esta forma dos días sobre otros métodos convencionales.
La actual tecnología supone incubar muestras de sangre en recipientes de 24 a 48 horas sólo para ver si la bacteria está presente”, afirmó James Carey, investigador de la Universidad Nacional de Kanhsiung en Taiwán.
Lleva otras 24 horas o más identificar el tipo de bacteria para seleccionar al antibiótico adecuado para tratar al paciente. Para entonces, los órganos de este pueden estar dañados o puede estar muerto a causa de septicemia
.
Presentada en una conferencia en Indianápolis de la Sociedad Estadunidense de Química, la nariz
es en realidad una botella de plástico del tamaño de la palma de la mano rellena con líquido nutriente que ayuda al crecimiento de la bacteria.
Adjuntos en el interior de la botella se encuentra una pequeña variedad de puntos químicos que cambian de color en reacción a los olores desprendidos por la bacteria delatora.
El nuevo dispositivo puede identificar ocho de las bacterias mas comunes que causan enfermedades, afirmó Carey en una nota de prensa difundida por la Sociedad Estadunidense de Química.
La tecnología se basa en un prototipo desarrollado hace un par de años por la Universidad de Illinois, aunque el modelo anterior utilizaba platos de laboratorio y material nutriente sólido para alimentar a las bacterias, lo que llevaba más tiempo y era menos sensitivo, según informó el comunicado.
Otro tipo de narices artificiales
ha generado prototipos que pueden detectar formas de cáncer en el aliento de un paciente, o la presencia de un ciertos explosivos.
En envenenamiento de la sangre o septicemia mata a más de un cuarto de millón de personas cada año sólo en Estados Unidos y cuesta en tratamientos más de 20 mil millones de dólares anualmente, según cifras ofrecidas en la conferencia.
El dispositivo podría ser utilizado casi en cualquier lugar del mundo por un costo muy bajo y con mínima formación
, afirmó Carey.