Madrid, 11 de septiembre.

El patronato del Teatro Real de Madrid informó la decisión de destituir a Gerard Mortier como director artístico, quien se encuentra fuera de España para someterse a tratamiento médico por el cáncer de páncreas que hace unos meses le detectaron.

La decisión, sin consultar a Mortier, se tomó a raíz de las presiones ejercidas desde las autoridades culturales del gobierno de Mariano Rajoy, las cuales discrepaban con la propuesta estética rupturista del director, quien deja su sitio a Joan Matabosch, hasta ahora titular del Teatro Liceo de Barcelona.

Mortier arribó a Madrid en enero de 2010, después de una dilatada carrera en la que se convirtió en uno de los directores de teatros de ópera de referencia y en un agitador cultural con una visión rupturista ajena a los formalismos y la tradición. Dejó huella en teatros como la Ópera de París, la de Bruselas y desde la dirección del Festival de Salzburgo.

En menos de tres años pasaron por Madrid sus principales cómplices para agitar los cimientos clásicos de la ópera, como el cineasta alemán Michael Hanecke, la artista serbia Marina Abramovich, el músico estadunidense Philip Glass o el dramaturgo Robert Wilson.

Las propuestas de Mortier, casi siempre ajenas a lo clásico y a los gustos –a su juicio apolillados de los espectadores habituales del Teatro Real– despertaron primero discretos rumores, después críticas abiertas y al final un enfrentamiento entre el público y el director que llegó a recibir cartas con insultos y amenazas.

Las autoridades y el patronato del Teatro Real anunciaron la destitución fulminante de Mortier sin esperar –como le habían prometido– a que volviera de su proceso curativo. En un comunicado, se informa: Esta decisión se produce tras sus recientes pronunciamientos públicos en los que manifestaba su decisión de dejar el Teatro Real si se eligiera a un candidato que no fuese de su propuesta. El Teatro Real, en todo caso, lamenta profundamente el estado actual de salud de Gerard Mortier, deseando su pronto restablecimiento, y hace constar públicamente su reconocimiento por la extraordinaria labor realizada durante los cuatro años que ha durado su relación profesional.