Ayer se realizaron diversos actos conmemorativos del 40 aniversario del golpe de Estado al gobierno democrático chileno de Salvador Allende. En el Museo de la ciudad de México un grupo de exiliados del país sudamericano recordaron los acontecimientos y agradecieron a México que en ese momento tendió la mano a decenas de personas que encontraron refugio aquí.

Entre gritos de ¡Viva Allende!, de canciones que hablaban de libertad y de volver a pisar las calles de Santiago, desfilaron en una pantalla imágenes del palacio de La Moneda en llamas. Soldados por todas partes y hombres y mujeres sometidos por las armas del ejército.

En el auditorio Ho Chi Min de la Facultad de Economía de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), Gonzalo Martínez Corbalá, ex embajador de México en Chile en aquella época; Ifigenia Martínez; Juan José Dávalos, académico de la UNAM, y la Asociación Salvador Allende Gossens, plantearon que no sólo se debe recordar a una gran figura y su proyecto, sino también mantener presente la fecha para que lo ocurrido en Chile no se vuelva a repetir.

Martínez Corbalá recordó lo ocurrido en aquellos días de 1973, las dificultades que se enfrentaron para lograr la salida de los que recibirían asilo en México y de cómo Salvador Allende estaba consciente de que venía un golpe de Estado y sería traicionado por la cúpula militar.

En el Senado, el grupo parlamentario del PRD también recordó los acontecimientos con una muestra fotográfica en el patio central de la sede legislativa.

El senador Alejandro Encinas dijo que la utopía, el ideario y los sueños de Allende están vigentes.