Hay un número indeterminado de rehenes y por lo menos 150 personas heridas
Al Shabaab, organización vinculada a Al Qaeda, difundió varios mensajes por Twitter
Represalia por la presencia de tropas kenianas en la ocupación de Somalia, señalan
Domingo 22 de septiembre de 2013, p. 22
Nairobi, 21 de septiembre
Unas 39 personas murieron y 150 fueron heridas, incluyendo niños, luego de que este sábado un comando armado entró en uno de los centros comerciales más lujosos de esta capital y tomó un número indeterminado de rehenes sin que hasta el cierre de ésta edición se hubiera llegado al final de esta tragedia. Entre los fallecidos están familiares del presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta.
El grupo islamita somalí Al Shabaab, con vínculos con Al Qaeda, se atribuyó el ataque en represalia a la presencia de tropas de la Fuerza Multinacional Africana en territorio somalí.
Los muyaidines entraron en el centro comercial Westgate hacia el mediodía y mataron a más de 100 infieles kenianos y la batalla continúa
, afirmaron los islamitas en un mensaje difundido por Twitter.
El grupo de atacantes disparó y lanzó granadas contra la clientela –formada principalmente por kenianos ricos y expatriados residentes en la ciudad– en uno de los ataques más violentos en el este de África desde que un grupo vinculado a Al Qaeda atacó las embajadas estadunidenses de Nairobi y Dar es Salam, capital de Tanzania, en 1998. En febrero de 2012, la red internacional informó que Al Shabaab se había unido a sus fuerzas.
Según las primeras informaciones un grupo de 18 hombres entró en Westgate, el lujoso centro comercial ubicado en la pudiente zona de las Westlands en la capital del país y comenzó a atacar a la gente de compras. También se reportó una fuerte explosión en el lugar.
Arrojaron una granada. Nos mostraban escritos en árabe. Si podías leerlos estabas a salvo, si no podías leerlos te mataban
, dijo un testigo.
Clientes aterrorizados se ocultaron en pasillos traseros mientras extremistas islámicos lanzaban granadas de mano y disparaban fusiles de asalto AK-47.
Según el diario The New York Times, algunos padres se tiraron encima de sus hijos para protegerlos con su cuerpo, otros escaparon por los cubos de ventilación y los menos se escondían tras manequíes y mostradores.
Los atacantes se atrincheraron en el interior del edificio de cinco pisos, con un número desconocido de rehenes. En respuesta, unidades de élite del ejército nacional se desplegaron para reforzar a las fuerzas policiales y ayudar a la evacuación del lugar.
Helicópteros de la policía sobrevolaron la zona mientras la policía armada gritó: ¡Salgan, salgan! Y muchas personas escaparon del edificio. Se movilizó a una brigada antiterrorista y a un equipo de rescate de rehenes.
Cientos de personas salieron corriendo, algunas con niños, otras sangrando fuertemente y se refugiaron detrás de coches estacionados y de bardas.
En el ataque murieron además de kenianos, ciudadanos estadunidenses, franceses y canadienses. La situación se prolongó hasta la noche, cuando aún se podían oír esporádicamente tiros en las inmediaciones del centro comercial.
De acuerdo con The New York Times, hacia la medianoche los comandos kenianos habían cercado a los atacantes en el tercer piso del centro comercial, según versiones de testigos.
Hasta el cierre de esta edición, trascendió que los muyaidines habían liberado a cinco rehenes, además, según la cadena de televisión CNN, uno de los atacantes fue muerto y cuatro fueron capturados. La cuenta de Twitter de losmiembros de Al Shabaab, quienes enviaron varios mensajes, fue cerrada por la red social.
Lo que los kenianos ven en Westgate es la justicia punitiva de los crímenes cometidos por sus soldados
involucrados en el conflicto somalí, afirmaron los atacantes.
“Por tierra por aire y por mar, las fuerzas kenianas invadieron nuestra patria musulmana, matando centenas de musulmanes en esas operaciones y desplazando a miles de personas, agregó el mensaje de los islamitas somalíes que amenazaron con más ataques.
Las fuerzas armadas kenianas ingresaron a Somalia en 2011 y desde entonces mantienen su presencia en el sur del país en el marco de una fuerza africana multinacional que apoya al gobierno somalí en su lucha contra los combatientes de Al Shabaab.
La Casa Blanca calificó de despreciable
el ataque y prometió ayuda a Kenia en sus esfuerzos contra el terrorismo. Los autores de este acto inhumano deben ser llevados ante la justicia, y hemos ofrecido nuestro apoyo total al gobierno de Kenia para lograrlo
, dijo la portavoz del Consejo Nacional de Seguridad estadunidense.
El Departamento de Estado de Estados Unidos calificó el ataque como “un acto de violencia desmedida.
Condenamos este atentado desmedido en el cual hombres, mujeres y niños inocentes fueron muertos o heridos
, señaló.
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon llamó al presidente de Kenia, Uhuru Kenyatta para externarle su preocupación y solidaridad
, mientras el Consejo de Seguridad condenó de la forma más severa el ataque.
En un mensaje televisado, Kenyatta dijo que el terrorismo es una filosofía de cobardes
y que Kenia ya había sufrido ataques terroristas antes, y volverá a derrotar
a quienes los cometen.
También añadió que perdió familiares muy cercanos en el ataque
llevado a cabo por perpetradores despreciables
.
Por su parte el presidente de Somalia, Hassan Sheik Mohamud, expresó sus condolencias para Kenia. En Somalia conocemos muy bien el precio humano de este tipo de violencia
y añadió que estos actos sin corazón contra civiles inocentes no pueden ser aceptados
.
Francia y Argentina también condenaron el ataque.