Contra autoridades y crimen organizado, la mayoría de denuncias: CEDH
Sábado 28 de septiembre de 2013, p. 24
Guadalajara, Jal., 27 de septiembre.
Cada año, más de 400 mil migrantes de países de Centro y Sudamérica transitan por el estado rumbo a Estados Unidos, en un viaje que dura hasta cuatro meses. En su trayecto, más de la mitad –unos 200 mil– han sido víctimas de abusos de autoridades y/o el crimen organizado, según un estudio de la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) de Jalisco.
Según el Diagnóstico sobre el ejercicio y garantía de los derechos humanos de los migrantes extranjeros en Jalisco, la ruta férrea Nogales-Tuxtla, de 3 mil 53 kilómetros, que atraviesa la entidad, es una de las predilectas de los indocumentados. En los últimos cuatro años, el flujo migratorio en ese trayecto se incrementó cinco veces
, según la CEDH.
Personal del organismo realizó durante cinco meses encuestas a 583 personas, entre migrantes y activistas, para la elaboración del estudio. Sobre sus derechos, estiman que no están en igualdad con los mexicanos y su visión sobre éstos se reduce a no sufrir violencia o humillaciones
.
De los indocumentados encuestados, 51 por ciento aseguró haber sufrido algún agravio, 24 por ciento se quejó de ser detenido arbitrariamente, 17 por ciento de haber sido robado, 15 por ciento de maltratos verbales, y 14 por ciento de haber sufrido golpes, detalló el presidente de la CEDH, Felipe de Jesús Álvarez Cibrián.
Expuso que de los migrantes consultados 16 por ciento responsabilizó a las autoridades de abusos; 19 por ciento expresó desconfianza hacia la función pública y el 65 por ciento restante manifestó que no ha acudido a las autoridades, o no contestó. Según el diagnóstico, seis de cada 10 migrantes viajan acompañados o con su familia como medida de protección ante la amenaza de encontrarse con grupos de delincuentes.
De las mujeres entrevistadas dos fueron víctimas de violación sexual y relatan cómo sus parejas sentimentales y sus compañeros de viaje decidieron no intervenir porque los agresores tenían armas y éstos, por su parte, dijeron sentirse culpables por no haber evitado la agresión
, detalló Álvarez Cibrián.
Según el estudio, 47 por ciento de los indocumentados que atraviesan territorio jalisciense provienen de Honduras, 15 por ciento de Guatemala, 9 por ciento de El Salvador, y los restantes de Chile, Cuba, Paraguay y Uruguay.
La mitad de los viajeros entrevistados mencionó que habían abandonado su país y su familia para conseguir empleo en Estados Unidos”. El estudio concluye que los migrantes que transitan por Jalisco reciben apoyo solidario de asociaciones civiles y la población, aunque gran parte de ésta los ve con desconfianza.
La CEDH propuso al gobierno estatal reformar el Código de Asistencia Social de Jalisco y armonizarla con los tratados internacionales suscritos por México para los derechos de los migrantes.