Sufre pobreza multidimensional extrema
10% de ese sector
Lunes 30 de septiembre de 2013, p. 25
En México ocho de cada diez adultos mayores presentan algún tipo de vulnerabilidad, ya sea en sus derechos sociales o en su ingreso
, informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), al difundir un panorama sobre la población mayor de 60 años a propósito de que el primero de octubre se conmemora el Día Internacional de las Personas de Edad.
Precisó que 72 por ciento de los mexicanos y mexicanas que tienen 60 años o más padece vulnerabilidad social, es decir, presenta por lo menos alguna de las siguientes carencias sociales: rezago educativo, no tiene acceso a los servicios de salud ni tampoco a la seguridad social, presenta deficiencias en la calidad y los espacios de la vivienda, así como en los servicios básicos en ella y carece de acceso a la alimentación
.
Una parte de este grupo adolece además de ingresos suficientes para adquirir bienes y servicios que satisfagan sus necesidades, por lo que son catalogados como en situación de pobreza multidimensional
, y representan 43 por ciento de este grupo poblacional.
Por si fuera poco, también los hay que padecen pobreza multidimensional extrema
y que equivalen a 10 por ciento del total de adultos mayores en el país, ya que todos sus ingresos los destinan a la compra de alimentos y aún así no pueden adquirir lo necesario para una alimentación adecuada, ni mucho menos satisfacer necesidades de otro tipo, refiere el Inegi basado en información del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Hasta el año pasado, según los resultados del Censo de Población, los mexicanos y mexicanas que tenían 60 años y más sumaban 10.9 millones, lo que equivale a 9.3 por ciento de la población total y se prevé que en 2050 representen 21.5 por ciento.
En la informalidad, 75%
La tasa de participación económica de los adultos mayores es de 33.8 por ciento, pero tres de cada cuatro trabajan en la informalidad y la mitad apenas percibe dos salarios mínimos mientras otro 16 por ciento no recibe ingreso.
Más de la mitad de los adultos mayores trabajan por su cuenta (51.8 por ciento), sólo 4.8 por ciento son empleados y otro 8.5 por ciento son empleadores.
Las condiciones laborales de los adultos mayores que se ocupan de manera subordinada y remunerada (34.9 por ciento) no son muy favorables, ya que la mitad (48.8 por ciento) no reciben prestaciones
, remarca el Inegi.
En la cuarta parte de los 28.2 millones de hogares que existen en el país vive al menos una persona de más de 60 años, y aunque predominan los casos donde son jefes de familia o cónyuges, también es frecuente que vivan voluntariamente o no con alguno de sus hijos, como estrategia de supervivencia y bienestar, sobre todo en etapas más avanzadas de envejecimiento
.
El 17.7 por ciento de los adultos mayores habita en viviendas con hacinamiento mayor a 2.5 personas por cuarto, 3.4 por ciento en lugares que carecen de piso, 1.8 por ciento en casas con techos de cartón o desechos y 1.4 por ciento con muros de láminas.
En los hogares donde al menos hay un adulto mayor, 30 por ciento de los ingresos totales provienen de transferencias, de las cuales la mitad proceden de sus jubilaciones, pensiones e indemnizaciones por accidente de trabajo, así como retiro voluntario. Otro 12.3 por ciento de los ingresos vienen de transferencias de otros hogares, 12.4 de donativos, 9.3 son beneficios de programas gubernamentales y 6.9 por ciento de transferencias de instituciones públicas y privadas para ciertos sectores de la población.