El presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani, reveló que siguen en pláticas con autoridades de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para modificar de forma sustantiva la reforma hacendaria propuesta por el presidente Enrique Peña Nieto, con miras a eliminar los aspectos más negativos para las empresas y los ciudadanos.

La propuesta del Ejecutivo federal no le pega a los más ricos, sino a las clases media y baja, reconoció, luego de una reunión de más de dos horas con los senadores del PAN, en la que insistió en que no se puede seguir recargando sobre los mismos contribuyentes cautivos todo el peso de la recaudación de un país.

Detalló que los empresarios participan en 15 mesas de trabajo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, con planteamientos más ambiciosos, entre ellos que el aumento al impuesto sobre la renta (ISR) no sea a partir de ingresos anuales de 500 mil pesos, como se establece en la iniciativa de Peña Nieto, sino de un millón 200 mil pesos, y a partir de ahí incrementar los gravámenes de forma progresiva.

De esa forma, dijo, realmente tributarán los que más tengan, que es lo más justo, y no como ahora, que en realidad le pegamos más a la clase media.

Al continuar con el cabildeo en el Congreso, detalló que los integrantes del CCE ven con preocupación la propuesta de disminuir a 41 por ciento las deducciones, ya que eso tendría un impacto importante en prestaciones sociales de los trabajadores, como son vales de despensa, participación de utilidades y otras, que las empresas no podrán pagar o de alguna manera se lo transmitirán al trabajador.

La cuota más grande del mundo

Igualmente expresó preocupación por el aumento de las cuotas obrero-patronales, ya que se da a partir de 3.5 veces el salario mínimo, sobre una cuota que es la más grande del mundo. Esos dos efectos, recalcó, en vez de impulsar la formalidad pueden generar un efecto contrario.

El aumento a los impuestos, a las prestaciones sociales en las empresas formales, en las que sí cumplen con el país, puede tener afectaciones muy graves en los niveles de inversión, de empleo y también en los costos reales para las empresas.

Gutiérrez Candiani rechazó que a través del mecanismo de consolidación fiscal los grandes empresarios evadan el pago de impuestos. “Pagan de acuerdo a lo que la ley les permite, y lo que hemos dicho de manera muy clara es que si hay abusos, se deben acotar. Lo que no se puede hacer es quitar un sistema que ayuda a la productividad, a la competitividad y a la inversión de las grandes empresas.

Igualmente, representantes de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) y otras cámaras industriales y de comercio se reunieron con los senadores Benjamín Robles, del PRD, y Eviel Pérez, del PRI, para también solicitar cambios a la reforma hacendaria.

Por su parte, el coordinador de los senadores de Acción Nacional, Jorge Luis Preciado, recalcó que se mantienen en la decisión de no votar en favor de esa reforma hacendaria y, al igual que Gutiérrez Candiani, consideró que debe modificarse en aquellos puntos que más lesionan a los mexicanos.