El Cinvestav imparte talleres para menores en Zacatenco
concreta y divertida
Sábado 5 de octubre de 2013, p. 33
Para que un niño se acerque a la ciencia, primero debe sentirla como actividad concreta e incluso divertida, en la que se permite tocar, experimentar y hasta equivocarse, haciendo de lado el estigma se que tiene de ella como aburrida
o difícil
.
De esta forma se inició ayer el programa Cinvesniños 2013, mediante el cual el Centro de Investigación y Estudios Avanzados (Cinvestav) del Instituto Politécnico Nacional abre sus puertas a estudiantes de educación básica para que conozcan la labor de sus especialistas.
Francisco Cordero Osorio, coordinador del encuentro, explicó que al acercar a los menores a la investigación de punta que se lleva a cabo se contribuye a formar la idea de que la ciencia puede ser una actividad disfrutable y lúdica.
El niño debe sentir de cerca lo que significa el conocimiento. Puede tocar, romper, mojarse o mancharse, todo ello en un contexto de placer. Un investigador no podría hacer su trabajo si se la pasara mal y queremos contagiar esa idea a los menores
, explicó Cordero.
Si, por el contrario, se le inculca a los pequeños que la ciencia es algo complicado en lo que no pueden participar, se alejan de ella y no la consideran como una alternativa de vida.
Según el funcionario, se espera que este año tengan unos 15 mil asistentes, quienes podrán participar en más de mil talleres y conferencias de especialistas en matemáticas, física, bioquímica, ingeniería o robótica.
Cinvesniños se realiza los días 4 y 5 de octubre, de 10 a 17 horas, en Cinvestav, avenida Instituto Politécnico Nacional 2508, colonia San Pedro Zacatenco.