Incluirá el rezago social en que operan escuelas; se inicia hoy
Martes 8 de octubre de 2013, p. 6
El censo de maestros y escuelas que inició el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), la semana pasada permitirá detectar a los profesores que realicen actividades adicionales a la docencia y contendrá el rezago social en el cual operan las escuelas para que puedan ser evaluadas de manera equitativa.
Eduardo Sojo, presidente del Inegi, informó este lunes que el ‘‘pase de lista’’ que aplicarán los encuestadores es fundamental en el proceso del censo. Los maestros deberán identificarse y de esta manera la Secretaría de Educación Pública (SEP) poseerá información sobre el personal docente con una plaza laboral, ‘‘pero que tengan otras actividades’’.
En el caso de profesores, los cuestionarios ‘‘hablan de los elementos que tienen para dar clases y sobre el tipo de capacitación que requieren’’ para hacer mejor su trabajo, explicó el directivo.
El arranque del censo resultó positivo en general en todos los estados, aunque habrá lugares en que deberán crearse ‘‘estrategias diferenciadas’’, por ejemplo, en las sierras de Chiapas o Guerrero, indicó Sojo Garza-Aldape, entrevistado luego de inaugurar la Conferencia Internacional de Geografía y Medio Ambiente Cigma 2013.
Desde este lunes, el Inegi registró que 86 por ciento de los encuestadores ya están visitando las escuelas. El directivo explicó que si se encuentra cerrada una escuela por diversos motivos, entre ellos que los maestros no estén impartiendo clases, entonces se visitará la siguiente sede educativa programada.
Admitió incluso que hay escuelas públicas y privadas que no han recibido las notificaciones de que serán censadas. En estos dos casos, dijo, los encargados del censo acudirán a los comités estatales, cuyos directivos los auxiliarán. Destacó que el sondeo se realizará entre octubre y noviembre, y arrojará resultados preliminares el 16 de diciembre. El compromiso es concluir los datos completos en el mes de marzo de 2014.
Agregó que el censo permitirá generar un atlas educativo que contendrá, además, el nivel de rezago social en donde se localizan las escuelas, dato que tendrá como base los registros del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
‘‘No es lo mismo evaluar a una escuela en una carta geoestadística de la zona de Polanco, que a una que está en Chiapas o Oaxaca. El censo contendrá el índice de rezago social para que las escuelas puedan evaluarse pares con pares’’, afirmó Sojo Garza-Aldape.
Para el conteo, el Inegi entregará cuestionarios a los directores de escuelas, profesores y a los alumnos que, a su vez, los remitirán a los padres de familia. Las preguntas son ‘‘muy detalladas’’ y fueron elaboradas para que las autoridades tengan un amplio conocimiento de las condiciones de las instalaciones educativas y de las necesidades escolares, y así dirigir de manera precisa la inversión en materia de infraestructura, dijo Sojo.
Puso de ejemplo que en uno de los cuestionarios se pregunta si existen sanitarios, rampas para personas con discapacidad, cuántos bebederos hay y hasta cuántos vidrios están rotos. Un segundo cuestionario ‘‘salón por salón’’ es el relacionado con el denominado ‘‘pase de lista’’ a los maestros.