Buenos Aires 16 de octubre.

El diputado oficialista Juan Cabandié, hijo de desaparecidos durante la pasada dictadura militar en Argentina (1976-1983), advirtió que el uso fragmentado de un video filmado hace meses por un gendarme, donde él se defiende de los intentos de éste y un grupo de policías que intentaban confiscal su automóvil, sin causas legales, se advierte como una operación mediática y política por sus características.

El joven diputado ha pedido perdón por algunas respuestas que dio a quienes lo detuvieron en un retén, después de estar largo tiempo, durante el cual su automóvil fue registrado, también ilegalmente, con el argumento de que no tenía el recibo del último pago de ese mes del seguro. No existe ninguna ley por la cuál se pueda confiscar un automóvil por razones del seguro.

Cabandié fue víctima de la dictadura. Su madre Alicia Alfonsín, de 17 años, fue secuestrada un poco después que su padre Daniel Abel Cabandié 19 años. Alicia fue derivada de por los menos dos centros clandestinos de detención a la Escuela de Mecánica de la Armada (Esma) uno de los mayores que existió en el país. Allí nació el niño en marzo de 1978 al que dejaron sólo 15 días con su joven madre, cuando a ella la llevaron en un traslado como le llamaban a los vuelos de la muerte en los las víctimas eran arrojadas al mar. Ella y su esposo están desaparecidos.

El niño fue apropiado por un policía, Luis Falco (ya condenado) que trabajaba en los grupos de tareas de la dictadura y lo inscribieron a su nombre. En manos de este hombre sufrió toda clase de malos tratos y golpes.

Cabandié se crió como hermano de Vanina Falco, hija de sus apropiadores, que incluso también denunció lo que había sufrido el joven. El 26 de enero de 2004 fue encontrado por Abuelas de Plaza de Mayo y restituido a su familia.

Hace más de cinco meses el ahora diputado del Frente para la Victoria fue detenido en un retén de policías y gendarmes en la provincia de Buenos Aires; allí lo retuvieron largo rato, pidiéndole el recibo del pago del seguro, y le dijeron que de lo contrario debía dejar el automóvil.

Él no se presentó como diputado, y cree que estaban haciéndole tardar para que les pagara una coima (soborno), como sucede muchas veces. En esos momentos -relató Cabandié a La Jornada- se dio la discusión y hubo una prepotencia por algunos de la fuerza de seguridad, con los que discutió. Luergo apareció un gendarme que parecía el jefe del grupo y ante este se identificó como diputado. En el interín hizo una llamada para preguntar si le podían confiscar el automóvil por carecer del comprobante del seguro y le dijeron que eso no era legal.

En el grupo estaba una mujer policía y en algún momento Cabandié dijo de de ella que era una desubicada, y que debían aplicar correctivos, por esas conductas. Finalmente le entregaron sus papeles.

De repente en estos momentos de campaña electoral dos días después que Cabandié, debatió en un programa televiso con la opositora Elisa Carrió, y el rabino derechista Sergio Bergman, en una mesa preelectoral, en la que salió victorioso el político oficialista, aparece eun un programa crítico al gobierno el video de esta filmación ilegal.

El video fue presentado en fragmentos sólo con la voz de Cabandie.

Como esto fue tan utilizado mediáticamente aquí y en periódicos del exterior que normalmente atacan al gobierno, comenzó a advertirse que ésta es una operación político-mediática.

Primero, por qué lo filmaron. Segundo quién guardó ese video y por qué o a quién vendieron este video y luego por qué aparece en el marco de la campaña electoral tantos meses después.

Yo sé que he estado mal, que me enojé mal, pero he ofrecido disculpas. Yo tenía el recibo de la última cuota del seguro tuvo y sabía que decía la verdad, dijo Cabandié, quien mencionó la virulencia y prepotencia del gendarme, y recordó que no era el primer ciudadano que se enoja ante estas situaciones.

Sé que no tengo que actuar así y no me gusta ver el video donde aparezco con esa actitud. Pero me enojé porque me asistía la verdad y porque ahora no aparece nada de lo que me decían a mí y cómo me trataban:

También esta es la impresión de algunos analistas después que el vocero de los gendarmes que en 2012 tomaron el Edificio Central de Gendarmería en esta capital para exigir reclamos salariales y que en un momento hicieron temer un intento golpista hiciera declaraciones al diario La Nación.

El ex suboficial Raúl Maza dijo que aconsejó a sus compañeros que había que difundir ese video, pero les dijo que no lo subieran ellos (a Internet) sino que de lo dieran a otro. Esto es lo sucedido y ahora Cabandié ha sido revictimizado por una campaña mediática, que no ahorra crueldades.