Mandatarios asistentes llaman a renovar el instrumento
Sábado 19 de octubre de 2013, p. 11
Ciudad de Panamá, 18 de octubre.
Con la ausencia ‘’record’’ de la mitad de las 22 naciones que la conforman, hoy se inició aquí la edición 23 de la Cumbre Iberoamericana.
Por diversas razones –problemas de salud y de agenda, fueron los principales argumentos– no asistieron los presidentes de Argentina, Brasil, Bolivia, Chile, Cuba, Ecuador, Uruguay, Venezuela, Guatemala, Nicaragua y Perú, y tampoco vino el rey Juan Carlos de España, por primera vez desde la existencia de este mecanismo multinacional.
Otros mandatarios han acortado su programa de actividades, como el propio presidente mexicano Enrique Peña Nieto, quien se encuentra aquí desde la noche del jueves, pues él mismo anunció que no acudirá al almuerzo de clausura del sábado y adelantará su regreso a México para las primeras horas de la tarde.
De hecho, el almuerzo –o desayuno en ocasiones– que invariablemente tenían en el arranque de estas cumbres el presidente mexicano con su similar del gobierno español, el rey Juan Carlos y el príncipe Felipe de Borbón, esta vez se limitó a una comida donde sólo estuvieron Enrique Peña Nieto y Mariano Rajoy, no obstante que el heredero de la corona española sí está en Panamá.
Los mandatarios del mecanismo iberoamericano y sus cancilleres han coincidido en la necesidad de encarar el desafío de renovar este instrumento que nació en la ciudad mexicana de Guadalajara en 1991.
Paradójicamente, y cuando más evidente resulta su pérdida de impulso, el presidente Enrique Peña Nieto recibirá en Panamá la presidencia pro témpore de la Cumbre Iberoamericana, la cual volverá a reunirse en Veracruz en 2014.
En un videomensaje enviado para la inauguración del encuentro, el rey Juan Carlos afirmó que la renovación de la conferencia es necesaria para atender mejor a la comunidad iberoamericana de naciones de la que todos formamos parte
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En el mismo sentido habló también el secretario general de este mecanismo, Enrique Iglesias: “El espacio iberoamericano debe ser renovado porque tiene sentido hacerlo’’. El uruguayo también se apresta a dejar el cargo luego de ocho años al frente de la secretaría general.
De acuerdo con la agencia de noticias Dpa, quien mayores posibilidades tiene para sucederlo es Rebeca Grynsdan, ex vicepresidenta de Costa Rica, secretaria general adjunta de la ONU y administradora asociada del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo.
El año pasado en Cádiz, España, se formó un grupo de reflexión encabezado por el ex presidente de Chile Ricardo Lagos para elaborar un informe con iniciativas de transformación tanto de esta cumbre como del propio sistema iberoamericano.
Hasta ahora la mayor recomendación –y al parecer con suficiente consenso– es la de celebrar estos encuentros en forma bianual. Aunque no se aplicaría de inmediato, pues, como se ha formalizado, México organizará la del próximo año.
De este modo, esta cumbre de las ausencias –las cuales incluso superaron a las de Asunción en 2011– ha llevado a todos a pronunciarse, incluso al propio presidente Rajoy, quien esta vez no ha tenido frente a sí ninguna presencia que pueda hacer sombra a su discurso, pues básicamente son presidentes de izquierda los ausentes en esta capital panameña.
“Después de 22 años de funcionamiento hace falta el nuevo impulso de una renovación para adaptarnos’’ a la situación actual, planteó.
Para este sábado se tienen previstas las sesiones plenarias con el tema de discusión: “El papel político, económico, social y cultural de la comunidad iberoamericana en el nuevo contexto mundial’’, y en las que participará el presidente Peña Nieto.
La agenda del titular del Ejecutivo incluye reuniones bilaterales con los presidentes de Paraguay, Horacio Cartes, y de Honduras, Porfirio Lobo.