Cofepris espera publicación de modificaciones a reglamento en el Diario Oficial
Proyecto prevé que se dejen de transmitir anuncios varias horas por semana
México, el país con mayor exposición a comerciales; cada dos horas los niños ven más de 12 mil comerciales
Domingo 27 de octubre de 2013, p. 33
México es el país con el mayor número de comerciales televisivos de alimentos y bebidas que carecen de contenido nutrimental. En dos horas diarias de transmisión, a lo largo de un año los niños ven más de 12 mil 400 de anuncios, y de acuerdo con evidencia científica existe una relación directa entre la exposición a esos mensajes y el incremento del sobrepeso y la obesidad.
Lo anterior es el sustento de la reforma al Reglamento sanitario de publicidad, elaborada por la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), a fin de que esos comerciales dejen de transmitirse en horarios infantiles de lunes a viernes y todo el día durante sábados y domingos.
Aunque el proyecto de modificación ya pasó por el periodo de consulta pública y fue autorizado por la Comisión Federal de Mejora Regulatoria desde el pasado 23 de septiembre, no se ha publicado en el Diario Oficial de la Federación.
Ante el retraso en el procedimiento y con la finalidad de cumplir la normatividad sobre transparencia y acceso a la información, a petición de Cofepris la Cofemer emitió una constancia de que el trámite concluyó en esa instancia; lo siguiente es la publicación oficial.
Las modificaciones
Los cambios en el reglamento consisten en adicionar tres artículos. El primero (22 bis-1) señala que en la televisión abierta y de paga, en los horarios de 14:30 a 19:30 horas de lunes a viernes y de 7 a 19:30, los sábados y domingos, sólo se podrán transmitir comerciales de alimentos o bebidas prenvasadas que cumplan con los criterios nutrimentales
que determine la Secretaría de Salud.
Tales criterios se darán a conocer en un acuerdo de la dependencia, que también deberá publicarse en el Diario Oficial de la Federación. La reforma reglamentaria no fija plazo para ello y de acuerdo con especialistas, aunque el proyecto es positivo, podría quedarse corto
en las especificaciones de los productos que deberán salir del aire.
Además, el mismo artículo admite excepciones. Los mensajes de productos también conocidos como chatarra se podrán transmitir en horarios de telenovelas, deportes, noticieros, series y películas para mayores de 15 años, siempre que se compruebe con estudios de audiencia, que menos de 35 por ciento del público tiene de 4 a 12 años de edad.
El artículo 22 bis-2 se refiere a las limitaciones de alimentos y bebidas sin nutrimentos en las salas de cine, bajo los mismos criterios. El artículo 22 bis-3 especifica las mercancías sujetas a regulación: bebidas saborizadas, confitería, chocolates, productos similares de chocolates y botanas. Se excluyen las bebidas saborizadas con bajo contenido energético (azúcar).
La justificación que presentó la Cofepris para sustentar la reforma al reglamento refiere estudios del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición Salvador Zubirán sobre la exposición de los niños a mensajes en televisión, así como investigaciones internacionales que comprueban una relación con aumento del peso corporal.
Este es un problema grave, pues en el país 30 por ciento de los menores tiene sobrepeso y obesidad, lo que coloca a México en primer lugar mundial en este nivel de la enfermedad.
De igual forma, el organismo dependiente de Salud aseveró que la modificación es necesaria porque el Código de Autorregulación de la Publicidad dirigida al Público Infantil (Código Pabi) vigente desde 2009 no ha funcionado. Es la primera vez que de manera oficial se reconoce una demanda añeja de organizaciones civiles.
Los cambios regulatorios repercutirán en una disminución de 39 por ciento de la exposición a publicidad en los niños de 4 a 9 años y de 28 por ciento en los de 10 a 15. Esto, a su vez, contribuirá a disminuir el sobrepeso y obesidad, y por lo tanto, la inversión del sistema nacional de salud para atender enfermedades asociadas, cuyo costo es de alrededor de 400 millones de pesos.
Actualmente, la inversión supera 42 mil millones de pesos anuales sólo en la atención de cuatro padecimientos: cáncer de mama, diabetes, afecciones cardiovasculares y osteoartritis.