El jefe de Gobierno capitalino, Miguel Ángel Mancera Espinosa, envió a la Asamblea Legislativa la iniciativa con proyecto de decreto por el que se expide la Ley para el Desarrollo Económico del Distrito Federal, que plantea, entre sus objetivos, generar fuentes de empleo, consolidar los existentes y promover el autoempleo; fomentar la inversión productiva y la mejora regulatoria; atraer inversiones, modernizar la actividad económica, y fomentar de manera prioritaria la creación, crecimiento y desarrollo de las micro, pequeña y mediana empresas.

La propuesta del titular del Gobierno del Distrito Federal (GDF) crea las áreas de desarrollo económico (ADE) como perímetros específicos para la activación, reanimación, consolidación, desarrollo y crecimiento de la actividad económica, que podrán ser objeto de estímulos fiscales, financieros, tecnológicos y de inversión, entre otros.

Dichos estímulos podrán ser incluso donación, venta condicionada, permuta, arrendamiento, comodato o fideicomiso de bienes inmuebles con vocación industrial.

Crea también los comités de fomento económico delegacionales, integrados por los titulares de las demarcaciones, una persona designada por la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco) y representantes de la iniciativa privada, los servicios financieros e instituciones de investigación y educación técnica, media y superior públicas y privadas, y además define las funciones de la Comisión Interdependencial para el Fomento y Promoción del Desarrollo Económico, creado en enero del año pasado por el mandatario capitalino.

Deberán fijarse también programas sectoriales con metas y objetivos de mediano plazo, con vigencia de seis años y sujetos a revisión y, en su caso, modificación y actualización por lo menos cada tres años.

La iniciativa –que una vez aprobada por la Asamblea Legislativa sustituirá a la Ley de Fomento para el Desarrollo Económico del Distrito Federal, publicada en 1996 a iniciativa del entonces presidente de la República Ernesto Zedillo– confiere a la Sedeco amplias funciones, como la definición de estrategias de ordenamiento territorial de la actividad económica, políticas de verificación e inspección, así como la mejora regulatoria, que tiene el fin de facilitar, agilizar y reducir los trámites, requisitos y plazos para el establecimiento y operación de empresas.

El proyecto señala como directrices: desarrollo sustentable; mejora regulatoria; aprovechamiento territorial; inversión; fortalecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas; promoción del empleo productivo; desarrollo e innovación en ciencia y tecnología; impulso a la infraestructura y creación de bienes de uso público, e integración de la actividad productiva.

La propuesta de ley pone énfasis en la vinculación de los agentes económicos con los centros universitarios y de innovación tecnológica, y encomienda a la Secretaría de Ciencia, Tecnología e Innovación y a la Sedeco promover las acciones que propicien estos vínculos, la cooperación interinstitucional, así como proyectos de investigación.