El Gobierno del Distrito Federal no va a ir a ninguna confrontación con la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), afirmó el ejecutivo local, Miguel Ángel Mancera Espinosa, luego del repliegue del campamento instalado desde hace más de tres meses por dicha organización.

Sin embargo, el secretario de Gobierno capitalino, Héctor Serrano Cortés, advirtió que no permitirán a los maestros ocupar nuevamente las zonas liberadas y de hacerlo, por una cuestión de tomar espacios, lo consideraremos una venganza y se actuará en consecuencia.

En conferencia de prensa, Mancera Espinosa, expresó que la recuperación del espacio donde se encuentran las fuentes, que se realizó el pasado domingo, se debió a que se había llegado a un acuerdo con los representantes del campamento para retirar las carpas que ya no eran utilizadas, por lo que, afirmó, no fue un desalojo, ya que en la Plaza de la República continúan 120 profesores.

Manifestó que su administración continúa abierta al diálogo y presta a participar como interlocutora, con el ánimo de evitar confrontaciones, pero también atiende el cuidado de los ciudadanos de la capital, por lo que, dijo, la presencia policiaca se mantendrá en la Plaza de la República en tanto sea necesario.

Cuestionado sobre si se tolerará un nuevo plantón, manifestó que no es cuestión de tolerancia, sino de que haya ya un alivio total de este conflicto y no se tome a la ciudad como escenario del mismo, pues en muchos de los estados es donde están las mesas de negociación.

De su lado, Serrano Cortés reiteró que en días pasados se acordó con los líderes del magisterio el retiro de las carpas vacías y su repliegue en la parte poniente del Monumento, y el domingo venció el plazo otorgado, por lo cual se iniciaron los trabajos correspondientes.

No se trató de un asunto de represión, sino de cumplimiento de los acuerdos alcanzados para atender una cuestión de protección civil y mantenimiento de la zona; tocará al gobierno federal resolver sus demandas para evitar nuevas movilizaciones en la ciudad, explicó.

Agregó que la ciudad no puede resolver sus demandas, por tratarse de un conflicto federal, pero tiene la obligación de aportar lo necesario para que los capitalinos padezcan lo menos posible con la toma de espacios o movilizaciones. Y, en ese sentido estamos actuando, afirmó.

Al respecto, el presidente de Canacope, Gerardo López, calificó de positivo el repliegue de maestros por las autoridades capitalinas, quienes respondieron a una demanda social, no a un acto de represión, aunque dejaron pasar 115 días, provocando pérdidas para el sector por 895 millones de pesos, cifra tres veces mayor a la reconocida por ellas, de 280 millones.

Mientras, la Autoridad del Espacio Público intensificó las labores de limpieza y desinfección del área desocupada, trabajos que durarán dos semanas.