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Les da la bienvenida si son elementos de calidad

El aumento de los naturalizados repercutirá en Chivas: Güero Real
 
Periódico La Jornada
Viernes 10 de enero de 2014, p. a13

Guadalajara, Jal., 9 de enero.

José Luis Real, técnico de Chivas, señaló que la mayor integración de jugadores naturalizados en el futbol mexicano repercute en Chivas, debido a que podrían reducirse las posibilidades de contratar a elementos nacionales en las posiciones que necesitan.

Sin duda afecta, pero estamos en el Guadalajara y la política es dar oportunidad a los jóvenes con calidad. No es aventar a los jóvenes sólo por aventarlos, deben tener mucha calidad y el tema nos afecta en algunas posiciones que no podamos cubrir con jugadores de las fuerzas básicas. Ahí sí tenemos que salir a buscarlos, dijo.

El Güero Real consideró que la apertura a más naturalizados –podrán jugar como mexicanos tras recibir su pasaporte, sin tener que esperar dos años más– podría afectar si no se aprovecha de forma adecuada.

Si se va a naturalizar a destajo, sin ninguna duda perjudica, no solamente a los jóvenes, sino también a gente que tiene calidad y está en riesgo de que llegue un extranjero, pero si no es así, no tengo duda de que nuestro futbol se verá fortalecido, porque se necesitan referentes en todos los equipos, asentó.

Pese a que el conjunto rojiblanco sólo contrata a futbolistas nacionales, el entrenador señaló que los jóvenes necesitan gente importante y de experiencia para incrementar su nivel, y en ese sentido los naturalizados de calidad podrían fortalecer la liga en general.

No tengo duda que si son elementos de mucho nivel, extranjeros y naturalizados son bienvenidos. Aquí todo pasa por la calidad, no porque de repente cualquier foráneo se naturalice y sea tomado en cuenta por eso y no por su desempeño, anotó.

Por otro lado, Real se resistió a tocar cualquier punto sobre el arbitraje, pues sostuvo que es un tema que no se aborda en el equipo.

“En Chivas es una política no hablar del tema; si es bueno, que nos ha tocado, regular o malo, que también lo hemos vivido. El silbante no puede agarrar a un jugador para que meta gol o detenerlo para una acción defensiva; los errores los cometemos los técnicos y los futbolistas.

A menos que sea algo muy fuera de lo normal, no hablaremos de eso, anotó el timonel tras la práctica del equipo en su estadio y ante su presidente, Jorge Vergara.