La reforma energética tendrá un impacto de 0.3 por ciento en el crecimiento del país durante 2014, y de 1.1 en 2018, cuando concluya la actual administración federal, señaló ayer la senadora Dolores Padierna con base en documentos que entregó el gobierno federal al Congreso.

Criticó que se vaya a perder la inmensa riqueza generada por el petróleo para tener metas económicas pírricas.

Al asistir al primer informe de actividades de la diputada Lizbeth Rosas, señaló que en la integración de las leyes secundarias de esta reforma el PRD tiene el objetivo de establecer controles que garanticen transparencia y rendición de cuentas sobre la renta petrolera.

También dijo que se promoverá la realización de una consulta popular sobre la reforma energética, haya o no ley secundaria, y ello se efectuará haciendo uso del derecho consagrado en el artículo 35 constitucional, el cual establece que la población puede ser consultada sobre temas de trascendencia nacional.

Padierna refirió en su intervención que la reforma financiera sólo tendrá un impacto de 0.2 por ciento en el producto interno bruto (PIB) en 2014, y de 0.4 por ciento en 2018.

Sobre los cambios legislativos en materia laboral, explicó que no crearon ni un solo empleo, pero sí sirvieron para precarizar el trabajo existente, facilitar los despidos y eludir prestaciones de los trabajadores.

Por lo que hace a la reforma hacendaria, resaltó que sirvió de pretexto para incrementear el precio de los alimentos y las tarifas de los servicios del sector público

La vicecoordinadora del grupo parlamentario del sol azteca en el Senado consideró que se ha puesto a las reformas neoliberales como un producto milagro, como si con ellas fuera a ocurrir un milagro en la economía, pero lo cierto es que ésta se encuentra estancada.