Los 40 mil 600 internos de los centros de reclusión del Distrito Federal serán sometidos a un censo de peso y talla, con la finalidad de determinar el estado de salud que prevalece entre la población penitenciaria y desarrollar métodos para combatir estilos sedentarios de vida. Asimismo, podrán denunciar cualquier violación a sus derechos humanos, actos de corrupción y los problemas que enfrentan en los días de visita.

El subsecretario del Sistema Penitenciario, Hazael Ruiz Ortega, señaló que con el apoyo de la Secretaría de Salud capitalina se impulsarán programas de prevención y atención de enfermedades como hipertensión y diabetes, principalmente, a lo cual se sumará el reforzamiento de las actividades físicas, para lo cual se firmará un convenio con el Instituto del Deporte.

El diagnóstico, a realizar en la última semana de enero, nos permitirá no sólo saber el peso actual de los internos, sino tomar algunas medias respecto de su alimentación e implementar más actividades deportivas para combatir el sedentarismo, en cumplimiento a la instrucción establecida por el secretario de Gobierno, Héctor Serrano Cortés, explicó.

Mencionó que este censo de peso y talla se llevará a cabo en el Centro Femenil de Reinserción Social Santa Martha Acatitla, con el fin de actuar en consecuencia, pues según algunas de las estadísticas realizadas, 65 por ciento de la población carcelaria del Distrito Federal no practica ningún deporte.

Por ello es necesario de trabajar en ese sentido, pues el deporte, junto con la educación y el trabajo, forman los tres ejes fundamentales del proceso de reinserción social, destacó Ruiz Ortega.

Por otra parte, la presidenta de la Comisión Especial de Reclusorios de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Olivia Garza de los Santos, inició una campaña para promover los derechos de los internos de los Centros de Readaptación Social y de sus familiares, además de realizar una encuesta para conocer cuáles son las problemáticas más recurrentes que enfrentan durante los días de visita.

En las inmediaciones del Reclusorio Oriente, comentó que lo que queremos es que la gente empiece a denunciar cualquier violación a los derechos humanos o de corrupción en los penales, e informarles sobre los mecanismos de denuncia, para inhibirlos.

Mencionó que visitará los 10 centros de reclusión locales y que las denuncias hechas por los familiares durante dichos recorridos serán turnadas a las dependencias correspondientes, como la Comisión de Derechos Humanos capitalina, la Secretaría de Salud o la Subsecretaría del Sistema Penitenciario.

Se trata, dijo, de que se les dé seguimiento puntual y sean resueltas.

Con información de Tania Sánchez