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Desde enero comunidades zapotecas reclaman fondos para obras

Desalojan a manifestantes de oficinas públicas en Oaxaca y aprehenden a 38
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Zapotecos de las agencias municipales de San Juan Guivini y San José, en Oaxaca, se enfrentaron ayer a unos 100 policías estatales que los expulsaron de la Ciudad Administrativa, en la capital del estado. Los manifestantes reclaman recursos para obras en sus comunidadesFoto Jorge A. Pérez Alfonso
Corresponsal
Periódico La Jornada
Martes 8 de abril de 2014, p. 28

Tlalixtac de Cabrera, Oax., 7 de abril.

Unos 100 policías estatales desalojaron a pobladores de las agencias municipales de San Juan Guivini y San José, perteneciente a San Francisco Ozolotepec, en la sierra sur, quienes el mediodía del lunes tomaron la Ciudad Administrativa, complejo que alberga oficinas de cinco secretarías estatales, donde impidieron el paso a los empleados. El gobierno del estado informó que 38 manifestantes fueron detenidos y que hubo seis agentes heridos.

Los zapotecos cumplieron hoy ocho días de movilizaciones en la capital del estado para exigir al presidente municipal, Filiberto Gallardo, la entrega de recursos del ramo 28 a las citadas agencias, que no los han recibido desde enero. Explicaron que las autoridades de San Juan Guivini y San José no han podido realizar obras a pesar de que ya presentaron proyectos.

Al mediodía, unos 80 pobladores de San Francisco Ozolotepec llegaron en camionetas al complejo gubernamental y cerraron el paso a los estacionamientos. Un grupo de transportistas ya había bloqueado la entrada principal.

Los inconformes, la mayoría campesinos, llevaban palos y machetes y arremetieron contra las rejas. Eustaquio Aragón Ramírez, agente municipal de Guivini, acusó al gobierno del estado y a los diputados locales de no atenderlos.

Durante la protesta, los quejosos incendiaron dos llantas y no permitieron salir a los trabajadores de las oficinas. Manifestantes y empleados empezaron a arrojar envases vacíos. En ese momento llegaron decenas de policías estatales antimotines.

A golpes y con gas lacrímogeno, los uniformados quitaron a los indígenas de la entrada del estacionamiento; los zapotecos respondieron a palos y quebraron alguno de los escudos. Un policía recibió un machetazo en la pierna. Del lado de los manifestantes hubo lesionados por golpes.

Después de la trifulca, los burócratas abandonaron la Ciudad Administrativa; cuando salió el último empleado, se ordenó detener a los indígenas y se suscitó otro enfrentamiento.

El secretario de Seguridad Pública, Alberto Esteva Salinas, escribió en su cuenta de Twitter que se acusará a los manifestantes detenidos de lesiones, privación ilegal de la libertad y ataques a las vías de comunicación.