Contraviene reglas mundiales, advierten expertos en una carta al presidente Peña
Las normas deben alertar sobre los azúcares añadidos y no promover su consumo, señalan
Lunes 21 de abril de 2014, p. 13
Expertos internacionales expresaron su preocupación por las disposiciones para el etiquetado en alimentos y bebidas no alcohólicas publicadas en el Diario Oficial de la Federación hace unos días, pues consideran que no ayudarán a combatir obesidad y diabetes, y sí pueden agudizar estos problemas de salud pública.
En una carta enviada al presidente Enrique Peña Nieto, 35 expertos manifestaron que estamos profundamente preocupados por la opción de etiquetado frontal obligatorio que su gobierno implementará, ya que es un etiquetado difícil de entender y tiene criterios que contravienen las recomendaciones internacionales y representan un alto riesgo para la salud de los mexicanos
.
Explicaron que con esta propuesta la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) induce a creer a los consumidores que una ingesta diaria de 360 kilocalorías (90 gramos) de azúcar es la ingesta diaria recomendada, es decir, 18 cucharadas cafeteras, y esto puede contribuir a agudizar la epidemia de obesidad y diabetes en el país.
Agregaron que desde 2003 la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda un máximo tolerable de consumo diario de azúcar añadido de 200 kilocalorías, y recientemente ha propuesto disminuir este máximo tolerable de azúcar añadido a 100 kilocalorías, es decir, cinco cucharadas cafeteras.
Nos sorprende esta propuesta, inapropiada para un etiquetado frontal, que suma los azúcares añadidos (añadidos por la industria y/o en restaurantes y hogares) con los azúcares naturales (presentes en forma natural en frutas, verduras y lácteos), ocultando la información a los consumidores sobre los azúcares añadidos, que son los más dañinos a la salud
, señala la misiva.
Advierte que esta práctica contradice el objetivo de la OMS que busca reducir el consumo de azúcares añadidos en los hábitos alimenticios con el fin de prevenir los riesgos de las enfermedades no transmisibles. Además, añade, la propuesta de etiquetado también contradice los criterios expresados en la Estrategia Nacional para la Prevención y el Control del Sobrepeso, Obesidad y Diabetes de México, que el gobierno federal anunció el año pasado.
Finalmente, advirtieron que con este nuevo etiquetado frontal, que aumenta el riesgo de obesidad y diabetes, también se pueden anular los beneficios del impuesto a las bebidas azucaradas. El etiquetado debe alertar del riesgo de consumir azucares añadidos y no promover su consumo
, señalaron.
El documento fue firmado, entre otros, por Kate Allen, de la Fundación Internacional de Investigación de Cáncer; Peter Baldini, de la Fundación Mundial Lung; Benjamín Caballero, de la Universidad Johns Hopkins; y Geoffrey Cannon, de la Escuela Pública de Salud de la Universidad de Sao Paulo.